Asuntos sociales

El 30% de los usuarios del nuevo comedor social son menores

El centro gestionado por Casa Caridad alimenta a 120 personas al día

La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, y la consellera de Bienestar, Asunción Sánchez ayer en el comedor
La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, y la consellera de Bienestar, Asunción Sánchez ayer en el comedorlarazon

La espera ya clásica de cientos de personas a las puertas de Casa Caridad con el objetivo de llevarse un plato de comida caliente a la boca se ha trasladado también a la calle Santa Cruz de Tenerife de Valencia, donde la asociación sin ánimo de lucro abrió un nuevo comedor social para hacer frente a la creciente demanda. Desde que inició el servicio, el pasado mes de octubre, el nuevo centro ha repartido más de 3.500 raciones de comida, puesto que tiene capacidad para alimentar a 120 personas al día. De ellos, el 30 por ciento son menores de edad que acuden con sus familias. De este porcentaje, la gran mayoría, más del 70 por cien, son niños con menos de seis años.

Así lo explicó ayer la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, que aseguró que el perfil de los atendidos «sobrecoge el corazón». En esta línea, indicó que es preferible posibilitar que los alimentos lleguen a los hogares de estas familias que se han quedado sin ningún tipo de ingreso debido a la crisis económica para que los niños puedan no ir a este tipo de instalaciones benéfica. Apeló por ello a la solidaridad de la ciudadanía, para que done alimentos de primera necesidad. Aún así, cuando esto no sea posible, «siempre les quedará la posibilidad de venir aquí».

La primera edil explicó que dicho comedor nació, a propuesta del Consistorio valenciano, para dar respuesta a la creciente demanda de plazas. El Ayuntamiento invirtió en este centro de más de 300 metros cuadrados unos 550.000 euros. Después firmó un convenio con la Asociación Valenciana de la Caridad para su gestión. Para mantener el comedor, el convenio contempló una cantidad de 220.000 euros al año más una adenda de 172.000 euros para dar cobertura al servicio.

El presidente de la organización, Antonio Casanova, agradeció la confianza depositada y valoró positivamente la colaboración entre Instituciones públicas y privadas. Además, explicó que el nuevo no es un comedor al uso, ya que los usuarios son atendidos también por trabajadores sociales que intentan resolver sus problemas a través de entrevistas personales.

En esta línea, la consellera de Bienestar Social, Asunción Sánchez, subrayó que este perfil de atendidos les obliga a comprometerse más para que estas familias puedan salir de la exclusión social. «En Valencia se están haciendo muy bien las cosas, es una suerte contar con una Asociación que tengan tanto compromiso y voluntarios y esté trabajando para las personas más desfavorecidas».

El comedor social funciona igual que el situado en el Paseo de la Petxina de la capital del Turia. Está abierto de 12.30 a 15.30 con diferentes turnos.

Por otra parte, un restaurante del municipio valenciano de Beniparrell ofreció ayer una comida de lujo gratuita a 350 personas con escasos recursos económicos, seleccionadas por los servicios sociales de siete municipios del área metropolitana de Valencia.