El juez cree que Alcón estaba lúcida y fue espontánea en la conversación grabada

El juez Víctor Gómez que instruye la denominada causa Taula sobre el presunto blanqueo de capitales del grupo «popular» del Ayuntamiento de Valencia, ha expresado en un auto su opinión sobre el estado de salud de la exedil María José Alcón cuando mantuvo con su hijo la conversación en la que le explicaba cómo se blanqueba dinero en el grupo, y que, tras ser intervenida por la Guardia Civil, constituye la principal prueba de cargo contra los imputados.

Considera su señoría que Alcón no padecía ningún trastorno mental grave en el momento de conversar con su hijo, y que la conversación fue espontánea, es decir, que no estaría inducida o dirigida por terceros, como sospechan la mayoría de las defensas de los imputados, basándose sobre todo en dos circunstancias: por un lado, que la conversación se graba el primer día en que se autoriza el pinchazo; y por otra, el tono exageradamente didáctico que emplea con su hijo, después de haber hablado con él de un asunto más escabroso como es la recalificación urbanística de solares.

Dice el juez que «se percibe por parte de las defensas una línea argumentativa tendente a poder demostrar que la conversación telefónica en cuestión (cuya trascendencia es indudable por ser prueba o indicio sustancial del delito de blanqueo investigado) no fue espontánea; en segundo lugar parece también cuestionarse el estado de salud mental de la investigada en el momento de mantener la conversación...» y cree el instructor «no haber calado al escuchar las grabaciones ningún indicio de que eso sea así», es decir, que para el juez ni la conversación estaba preparada, ni Alcón estaba ida en esos momentos.

De este modo, Víctor Gómez entra con su auto no sólo en la forma, sino también en el fondo del asunto, adelantado ya su opinión al respecto.

En cualquier caso, el juez resuelve dejar sin efecto la audición completa de la grabación realizada por la Guardia Civil y que estaba programada para el próximo día 14 de noviembre y esperar a que la Audiencia resuelva los recursos presentados tanto por la defensa de Alcón, como por el resto de defensas de los imputados. Piden los primeros que no se escuche la grabación completa pues las partes significativas para el proceso ya las ha extractado el instructor, mientras que el resto de defensas no solo piden la audición sino que quieren una copia. También arguye la defensa de Alcón que se está filtrando todo el proceso a los medios de comunicación, lo que considera su señoría «secundario».

Por otra parte, el juez Gómez dictó ayer auto sobre el resto de pruebas solicitadas y que incluían un pormenorizado informe médico pedido por las defensas de los imputados.

En este punto, da la razón el juez a la defensa de Alcón que pide un informe pericial forense que se realizaría en una fecha no comunicada para evitar el acoso de los medios. Sí que accede, en cambio, a que el hospital Nisa informe del ingreso y alta de Alcón, así como del uso del móvil durante la estancia, y de las visitas que recibió.