Escal reclama reabrir el Castor e insiste que es «seguro» y «fiable»

La empresa Escal UGS, promotora del almacén submarino de gas Castor, reclama al Gobierno que el proyecto se pueda volver a poner en marcha, avalándose en el informe de una consultora privada, e insiste en que la infraestructura es «segura» y «fiable» después de los centenares de seismos provocados.

El máximo responsable de la compañía, Recaredo del Potro, presentó ayer en unas jornadas del Colegio de Geólogos de Cataluña los resultados de una auditoría de la consultora privada DNV, que defiende la viabilidad del proyecto ubicado frente a las costas de Vinaròs (Castellón) y que Escal ya ha remitido al Ministerio de Industria.

Del Potro insistió, citando el informe, en que Escal ha actuado como operador «prudente» en referencia a los problemas geomecánicos y de posible sismicidad inducida. Subrayó también que el almacén necesitó hasta 42 autorizaciones diferentes y que se encuentra en «una de las zonas de menor peligrosidad sísmica del Mediterráneo».

Según los datos de la misma auditoría, el proyecto Castor habría costado 1.461 millones.

Algunos expertos mostraron su disconformidad con las explicaciones de la promotora, como el geólogo José Giner, quien afirmó que el modelo geológico de Escal es erróneo y que la estructura no sería apta para albergar un depósito.

La doctora Eulàlia Massana alarmó de que los datos de que se disponen no permiten descartar temblores en el futuro. Lo mismo opinó el jefe del área de sismología del Instituto Geológico de Cataluña, Xavier Goula, quien no descartó que otras fallas del entorno pudieran provocar terremotos de hasta 5 grados en la escala de Richter.

En la jornada estuvieron la alcaldesa de Ulldecona, Núria Balagué, el concejal de Urbanismo de Alcanar, Manuel Martín, y miembros de la Plataforma Ciudadana en Defensa de las Tierras del Sénia.