Expertos exigen una ley contra la violencia doméstica y escolar

Situaciones tan dramáticas como la violencia doméstica, el acoso escolar o la discriminación racial, precisan de una ley que cree estrategias de actuación frente a las mismas. Esta es una de las conclusiones de los expertos que participaron en la mesa redonda «Tots per la mediació», organizada por la dirección general de Inclusión de la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas.

En el foro participaron más de un centenar de profesionales de la Comunitat Valenciana, tanto de las oficinas de atención a las personas migrantes de los municipios como de las ONGs especializadas en mediación. La directora general de Inclusión, Helena Ferrando, destacó la importancia de la mediación en ámbitos como el educativo, donde es necesario utilizar estrategias como fórmula para la resolución de conflictos como el acoso escolar. En el terreno sanitario, dijo, debe servir como técnica para conseguir que la salud llegue a los más vulnerables.

Coincidió con los expertos en la importancia que la mediación tiene en la justicia, como arma para vencer un planteamiento «meramente punitivo», como es el actual, y pasar a otro donde el poder judicial tenga como objetivo «escuchar y realizar itinerarios educativos». La mediación, concluyó, es un instrumento para avanzar «hacia una sociedad más igualitaria, impulsando los procesos que favorezcan el desarrollo local y mejoren las condiciones de vida de toda la población», desde la prevención y la antelación a los problemas.

Sobre la mediación intercultural, propuso partir de los beneficios del «enriquecimiento mutuo de cada una de las culturas, de cómo se reacciona ante el diferente, de los miedos a los desconocidos y de cómo la sociedad a veces se perpetua como inamovible».

Ferrando manifestó el compromiso de la Conselleria con esta forma de actuar que, según dijo, «coincide plenamente con el nuevo espíritu de diálogo y de comunicación» del Gobierno surgido del Pacto del Botánico.

Los expertos que participaron en el foro abordaron también la llegada de personas refugiadas, y al respecto, Ferrando reiteró la voluntad de la Generalitat de fletar un barco con el que poder traer 1.100 personas de la isla griega de Lesbos, así como de acoger a estar personas, con más de 600 plazas de albergue.