Fabra exige apoyo al comercio para que 2013 sea el año de «cambio de ciclo»

«Estamos iniciando un cambio de camino», un nuevo rumbo. Así lo aseguró ayer el presidente de la Generalitat valenciana, Alberto Fabra, ante centenares de comerciantes, a los que reclamó su «apoyo y convencimiento» para que 2013 sea el año de «cambio de ciclo».

Fabra, que realizó estas declaraciones tras la entrega de los premios al Comercio Excelente que entrega la Generalitat, instó a este sector a «innovar, buscar fórmulas distintas», para hacer frente a los convulsos momentos económicos.

«Hay que realizar campañas de dinamización a través de los municipios, de forma que siempre haya motivos para ir a los comercios», indicó, e instó al sector a trabajar codo con codo con las Administraciones locales para llegar a este tipo de acuerdos.

«Estamos buscando que nos den aliento y esperanza», aseguró el jefe del Consell y explicó que existen indicadores que invitan al optimismo, como los dos meses consecutivos en los que ha disminuido el desempleo en la Comunitat, el aumento de las exportaciones y el de la producción industrial.

La implicación del comercio es especialmente importante para la recuperación de la economía valenciana, puesto que este sector representa el 11,4 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) de la Comunitat Valenciana y emplea a 350.000 personas.

La política de la Generalitat Valenciana de cara a estos negocios se basará en tres pilares. Por una parte, seguir trabajando para reducir los trámites burocráticos necesarios para crear un comercio; por otra, dar un asesoramiento personalizado para que sepan siempre qué es más conveniente en cada momento y, por último, la integración comercial, es decir, el aumento de tamaño de estas empresas.

Los premios entregados galardonaron a un total de 267 pequeños y medianos comercios de la Comunitat por su esfuerzo para innovar, modernizarse y dar productos de calidad.

Jordi Manso, el representante ayer en la ceremonia de entrega de los premios de Pollos Planes, hizo un alegato a favor de la profesión de comerciante, poco admirada por los jóvenes, pero muy necesaria.

Indicó que estos premios son un aliciente para seguir hacia delante y un reto personal que les ayuda a mejorar y no bajar la guardia, especialmente en tiempos de crisis. Se mostró convencido de que el comercio tradicional tiene «mucho futuro».