La ocupación del AVE a Alicante roza el «lleno» en tres semanas

valencia- Es pronto para poner al AVE Madrid- Alicante en el primer puesto de ocupación de las líneas de alta velocidad en funcionamiento de España, pero lo cierto es que en sus tres semanas ha conseguido unas cifras prometedoras. El director general de Ferrocarriles del Ministerio de Fomento, Miguel Pozo de Castro, aseguró ayer que desde su inauguración, la de Alicante ha alcanzado un porcentaje de ocupación «muy alto, casi al cien por cien».

El AVE a Alicante comenzó su rodaje en muy buena época, con las fiestas de las Hogueras y la temporada turística de verano a punto de comenzar. Por ello, sería normal que no se pudiese mantener estas cifras durante el resto del año, pero sí que podría a contribuir a subir la media del resto de líneas, que Renfe sitúa en el 75 por ciento. Esta cifra corresponde al intervalo que va del 8 de febrero al 11 de junio, periodo en el que comenzaron a aplicarse las nuevas tarifas con descuentos y bonos y que supuso un incremento del 14 por ciento de los viajeros.

En cualquier caso, el «ritmo es muy bueno». Pozo de Castro insistió en que hasta que el viajero modifica sus pautas de viaje, tras la llegada de una nueva oferta, pueden «pasar meses o un año». Apuntó a que esperan llegar a los dos millones de clientes al año.

Aunque no siempre Renfe tiene paciencia para esperar, el caso más sonado fue el de la línea Toledo- Cuenca- Albacete, que se suprimió tan solo siete meses después de su puesta en marcha. Tenía una media de 16 viajeros diarios, un 0,5 por ciento de ocupación.

Durante 2012, los AVE entre Valencia y Madrid con el 72 por ciento de los asientos llenos y la media de los cinco años del trayecto Barcelona- Madrid fue del 80 por ciento.

El director general de Ferrocarriles también respondió a aquellos que critican que el tiempo de viaje sea excesivo. Aseguró que el las dos horas y veinte minutos son «para estar orgulloso». No obstante, el viaje aumenta hasta dos horas y 38 minutos en muchos de los trayectos. En cualquier caso, Pozo de Castro sacó pecho e insistió en que no existe «relación en Europa que se acerque a estos datos». El compromiso de la ministra de Fomento, Ana Pastor, es que a finales de año ambas ciudades queden conectadas en dos horas y cinco minutos.

Por lo que respecta a las incidencias registradas durante las últimas semanas en este trayecto, aseguró que son similares a las que ocurrieron en otras líneas de España. Es más, matizó y dijo que él no hablaría de «problemas», sino de que se están produciendo los ajustes normales durante el periodo inicial. «Hay que minimizar este tipo de cosas porque estamos hablando de un tiempo de trayecto magnífico». Esta infraestructura es un «hito para el Corredor Mediterráneo».