Piden siete años de prisión por tener archivos pedófilos en su ordenador

La Fiscalía provincial de Valencia ha solicitado una pena de siete años de prisión para un hombre al que se le acusa de tener y difundir material pedófilo, concretamente grabaciones de vídeo descargadas de internet que contenían imágenes de sexo explícito cuyos protagonistas, en algunos casos, aparentaban tener menos de trece años.

La calificación del fiscal solicita esta pena al considerar que se ha cometido un delito de tenencia y distribución de material pornográfico, si bien reconoce que el propio programa para descargar este tipo de archivos o cualquier otro de la red, (el más popular es el conocido como Emule) obliga a poner a disposición de los demás usuarios el archivo que se está «bajando».

De hecho, cuando se está «bajando» es imposible impedir que otro usuario «baje» a su vez el contenido que ya se ha descargado en el disco duro propio.

Y cuando ha concluido la descarga, solo si el usuario «saca» el archivo de la carpeta «incoming» éste deja de estar a disposición del resto de usuarios.

Además, el hecho de tener más archivos almacenados en la carpeta «incoming» te puede otorgar mayor rapidez a la hora de descargar los archivos.

Estas circunstancias puede no ser conocidas por el usuario del programa Emule, que, a su vez, es de descarga libre.

El presunto pedófilo en cuestión que será juzgado esta semana en la Audiencia fue localizado por la Policía Nacional mientras realizaba una de estas descargas «de contenido inequívocamente pedófilo» y su dirección IP fue localizada por los investigadores. Concretamente en la localidad valenciana de Burjassot, donde el acusado se encontraba empadronado con su pareja. Sin embargo, cuando la Policía se personó en su casa, el acusado explicó que ya no vivía allí sino en casa de sus padres, por lo que fue trasladado hasta dicha vivienda donde se intervino un ordenador.

En el disco duro de dicho PC se encontraron un buen número de archivos de pornografía infantil. El ordenador del acusado contenía no uno, sino tres discos duros, de los cuales, uno de ellos se destinaba a descargar del Emule, mientras los otros dos almacenaban gran cantidad de videos «de carácter sexual o pornográfico y que por apariencia física de las personas que aparecen en ellos, los filmados son menores de edad, algunos incluso de apariencia menor a los 13 años, y muchos de ellos de carácter vejatorio o degradante.

El fiscal también trata de que se investigue otras dirección IP localizadas.