Educación

Puig resta valor a la educación en inglés e incide en que se invierte poco en valenciano

C’s pide que los padres voten si quieren un tercio de la educación en inglés

La portavoz de Ciudadanos, Carolina Punset, ayer en Les Corts; a la izquierda, el conseller Marzà
La portavoz de Ciudadanos, Carolina Punset, ayer en Les Corts; a la izquierda, el conseller Marzàlarazon

Ni el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ni el conseller de Educación, Vicent Marzà, mostraron interés en aumentar las horas lectivas de inglés -hasta alcanzar un tercio de las asignaturas- en la educación secundaria, como le propuso durante la sesión de control la síndica de Ciudadanos, Carolina Punset. Puig no solo restó importancia al asunto, diciendo que hay otras lenguas extranjeras importantes. «No se va hacia un mundo unipolar en inglés», sino que además remarcó que la valenciana es la autonomía que menos invierte en su lengua propia.

Recordó que el Consell quiere impulsar una ley educativa, con la participación del sector. «No es el caso de movernos en la educación a golpe de referéndum».

Descartaba así la propuesta de Punset, quien instó al Consell a realizar una consulta entre los padres para que decidan si quieren un tercio de la educación de sus hijos en inglés. «Ganaremos por goleada», pronosticó la síndica de Ciudadanos.

Por su parte, el conseller de Educación, Vicent Marzà, tampoco quiso dar pistas sobre su modelo lingüístico y simplemente anunció que presentará un modelo consensuado con expertos.

Punset desgranó las partidas previstas para 2016 para mejorar la educación en inglés y concluyó que «hay cero esfuerzo económico en incentivar su aprendizaje».

Denunció que la línea de dos millones presupuestados por la Conselleria que dirigía María José Català para estancias en el extranjero de alumnos de secundaria ha sido anulada y que la partida destinada a la enseñanza en inglés en secundaria y primaria es nula. Se dedican 150.000 euros a 17 líneas de subvención destinadas al «multilingüismo» y que, en general, hablan de formación en profesores más que de la inversión directa en las escuelas.

Por lo que respecta a la línea de ayudas de fomento del plurinlingüismo, afirma que aquellas que según Marzà pueden ir destinadas al inglés, incorporan siete millones para promocionar actuaciones como el etiquetaje o rotulación de empresas y subvenciones para entidades sociales.

Admitió que sí que ha aumentado el importe en las becas Erasmus, destino que Punset no cuestionó, pero sí recordó que el aprendizaje de un idioma es más sencillo en edades tempranas.

Defendió el modelo de Madrid que apostó hace una década por dar un tercio de las asignaturas en inglés y ahora está en la cabeza del informe PISA. Destina 30 millones a este objetivo, un dinero que puede obtenerse si se convierte en una prioridad. Sugiere que se obtenga de fundaciones de dudosa rentabilidad.