Reducir diputados, misión casi imposible para Fabra

VALENCIA- Seguir los pasos de la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, y reducir el número de diputados autonómicos no va a ser tarea sencilla para el jefe del Consell, Alberto Fabra, puesto que para aprobar la iniciativa en Les Corts es necesaria una mayoría de dos tercios, es decir, el PP ha de pactar con el PSPV. Pero las posturas casi opuestas de ambos ha hecho que, casi un año después de que Fabra anunciara la medida estrella, ésta esté prácticamente congelada.

Ayer retomaron el debate, aunque para quitarse responsabilidades y trasladar la pelota al tejado rival. «Lamento que el PSPV no se siente a negociar», afirmó la vicesíndica del grupo parlamentario popular, Marisol Linares.

La línea «demagógica y utópica» que está llevando a cabo la oposición, según Linares, imposibilita centrarse en los asuntos realmente importantes. «Cuando piden austeridad y el PP lanza propuestas como la reducción de diputados, Ximo Puig se opone», añadió. Para la vicesíndica, esto demuestra que el PSPV está inmerso «en una guerra interna» por definir quien será el próximo secretario general y que no se interesa por lo que realmente preocupa a los valencianos.

En Blanqueries, sin embargo, aseguran que sí están dispuestos a negociar el recorte de veinte escaños, siempre y cuando se aprueben otras medidas de austeridad en el seno de la Administración, como la supresión de altos cargos y asesores. Los socialistas consideran que con la eliminación de 147 puestos de responsabilidad, las arcas públicas ahorrarían 30 millones de euros hasta 2015 sin necesidad de cambiar el Estatuto de Autonomía y convocar un referéndum, requisitos para la reducción de parlamentarios. El ahorro de quitar veinte escaños, según los datos de Presidencia, sería de 700.000 euros anuales, pero no entraría en vigor hasta las próximas elecciones autonómicas.

Desde el Partido Popular insistieron en que el presidente de la Generalitat ya ha recortado en un 30 por ciento el número de altos cargos, pasando de 120 a 89, lo que ha supuesto un ajuste de 200.000 euros. Recordaron, en esta línea, la eliminación de dos Conselleries para quedarse en ocho y la supresión de los tres delegados del Consell en la Comunitat.

Además, subrayaron que en aras de la austeridad, también se ha aprobado una bajada de sus sueldos por la desviación del déficit. Así, el propio Fabra cobrará 1.366 euros menos hasta los 66.250 euros, mientras que los consellers dejarán de percibir 1.164 euros hasta los 56.436.

El salario de secretarios autonómicos, subsecretarios y directores generales ha bajado unos 1.100 euros.

250656 y los consellers, 1.164 euros menos.