Rita Bosaho: «Estas elecciones no premiarán a quien tenga más votos, sino a quien sepa pactar»

-Licenciada en Historia, ¿y si la historia se repite y vuelve a ganar el PP?

-Si nos creemos las encuestas, actualmente sería el partido más votado. Sobra decir que aceptaremos el resultado que salga de las urnas, pero no entiendo que las elecciones se hagan para que gane uno, menos en un país tan diverso como este. Entiendo las elecciones como un proceso de cuyo resultado se formará un Gobierno. Estas elecciones no premiarán a quien tenga más votos, sino a quien sepa pactar.

-También es trabajadora de la sanidad pública, ¿cómo se ve desde dentro?

-He visto cómo el hospital de referencia de Alicante acumulaba basura en las esquinas durante dos semanas porque la concesionaria no pagaba a los empleados. He visto cómo la gente traía ventiladores a sus parientes enfermos porque en verano no había aire acondicionado ni en postoperatorio. Ante los recortes del PP, los profesionales de la sanidad hemos intentado suplir estas carencias ofreciendo un alto nivel de profesionalidad. No actuaremos con el hacha y sí con la cabeza, reformando la Administración, priorizando la atención primaria y la financiación justa de las consejerías autónomas.

-¿La relación con Compromís es para siempre o un amor de invierno?

-Para siempre es algo que suelen decir los adolescentes. Como nunca. ¿Quién vive de un modo tan absoluto? La relación con Compromís es una relación que comenzó en primavera, justo tras las elecciones autonómicas que acabaron con 20 años de una gestión horrorosa por parte del PP y un desprecio y saqueo de las arcas públicas que aún está por conocerse su totalidad. El verano tuvo como fruto el «Pacto del Botánico». El otoño hizo la unión de facto. Y el 21 de diciembre, cuando empieza el invierno, creo que se producirá un cambio que nos hará a estar más juntitos a todos. En invierno, mejor abrazarse por el frío (risas).

-¿Usted también se cansa de hacer campaña como Pablo Iglesias?

-¡Claro que me canso! Es difícil para una persona como yo verse dando este salto, tan público. Es cansancio físico y mental. Soy tímida y te ves en situaciones, debates, donde te puedes sentir muy abrumada, nerviosa. Sobre esto último, me gustó una frase que dijo Ada Colau el otro día: «Mientras unos daban clases de oratoria, otros parábamos desahucios». Pues es mi caso. Y me canso, pero la ilusión es mayor.

-¿Quién le da más miedo (electoralmente hablando)?

-Nadie. Llevamos cuatro años luchando en las calles y plazas. Es el momento que estábamos esperando. Ya le digo que nunca nos hemos creído las encuestas.

-¿Se ve pactando con el PP o con Ciudadanos?

-Pactaremos con todos aquellos que quieran un cambio positivo para nuestro país y sus ciudadanos. Dicho esto, creo que este no es el caso del PP, que tiene bien claro para quién gobierna, las multinacionales y el poder económico. Por otro lado, Ciudadanos tendrá la oportunidad de definirse a partir del 20D. Veremos entonces de qué lado está, si del lado de la gente o del Ibex 35.

-¿Qué reclamaría para Alicante?

-Más inversiones por parte del Estado. Desde 2008 acumulamos un déficit de más de 2.000 millones en lo que se refiere a las inversiones estatales. Tenemos un gran déficit en infraestructuras especialmente ferroviarias. No podemos quedarnos sin conexión ferroviaria al Corredor Mediterráneo de mercancías en el puerto de Alicante. Exigimos también la liberalización de la AP7. Tradicionalmente hemos estado discriminados por las administraciones central y autonómica. No obstante, en el caso de Valencia esto está cambiando,

-¿Cómo calificaría esta campaña?

-Ilusionante. Agotadora. Una experiencia como no hay otra. Me ha servido para conocer mucha gente e interiorizar más lo que es España.

-¿Cómo se convence a un indeciso?

-A un indeciso le recomendaría que se lea los programas, que conozca nuestras propuestas y a nosotros. Hemos demostrado ser el agente principal del cambio en España en estos dos últimos años. Ahora falta dar el último paso para cambiar las instituciones y para no tener nunca más gobernantes que gobiernen de espaldas a la ciudadanía.