Tribunales

Seis agentes heridos al mediar en una riña entre dos colombianas

Uno de ellos tuvo que ser operado para reconstruirle el párpado tras un mordisco

Helga Schimdt llegó al Palacio de Justicia poco después del mediodía
Helga Schimdt llegó al Palacio de Justicia poco después del mediodíalarazon

Miembros de la Policía Nacional detuvieron el pasado domingo a cuatro personas acusadas de un delito de atentado a agentes de la autoridad por su presunta relación con la agresión a seis policías, uno de ellos intervenido quirúrgicamente para reconstruirle parte del párpado por un mordisco en la cara.

Los detenidos son tres mujeres y un hombre de entre 25 y 41 años y origen colombiano.

Los hechos tuvieron lugar el pasado domingo, en las inmediaciones de un bar del distrito de Abastos de la ciudad de Valencia, cuando agentes que realizaban labores de prevención por la calle Nicolás Estébanez observaron una discusión entre dos mujeres. Cuando los policías trataron de mediar entre ambas, el propietario del bar salió del establecimiento y les indicó que no querían­ su intervención y empujó a uno de los policías. Acto seguido, los agentes le solicitaron la documentación, pero el hombre se negó, les increpó e instó a quitarse el uniforme e iniciar una pelea. Según fuentes de la Policía, entre diez y doce personas salieron entonces del local, y los policías solicitaron la presencia de otros agentes. Al mismo tiempo, una de las mujeres lanzó un teléfono móvil y los zapatos, golpeando a uno de los agentes, y otra le cogió por el cuello y arrancó una cadena de oro. Hasta 20 personas intervinieron en el altercado, y los agentes pidieron nuevos refuerzos. En el momento de su detención, el dueño del local mordió a uno de los policí­as en la ceja izquierda y le provocó una herida abierta mientras le amenazó y manifestó que: «ahora te jodes que te he pegado el sida».

Una de las mujeres propinó además varias patadas a dos agentes cuando introducí­an al detenido en el coche oficial, ocasionándoles lesiones en los antebrazos.

Los agentes detuvieron también a tres mujeres por tratar de obstaculizar el arresto del hombre. De los seis detenidos, dos con antecedentes policiales, tres pasaron a disposición judicial y se decretó el ingreso en prisión de uno de ellos, concretamente el dueño del bar.

Una de las mujeres detenidas quedó en libertad con la obligación de comparecer ante la autoridad judicial cuando sea requerida.

Por otra parte, agentes de la Policía Nacional de Castellón detuvieron a un hombre de 27 años que, durante un permiso penitenciario, agredió a varios viandantes y daño tanto el mobiliario urbano como diversos vehículos.

Los hechos se produjeron el pasado viernes cuando la Policía fue requerida para acudir a la plaza Fadrell, donde un hombre «muy alterado estaba destrozando todo lo que encontraba a su paso». El detenido mostró gran agresividad y la Policía hubo de pedir refuerzos.