Silencio de Puig y Oltra a las denuncias de PP y Cs sobre las subvenciones a ACPV

Bonig y Sánchez piden que destinen el dinero público a acabar con las listas de espera y no a entidades catalanistas

Acció Cultural del País Valencià (ACPV) es una entidad que ha recibido de manera periódica subvenciones públicas desde qu en la Generalitat valenciana gobierna el PSPV y Compromís, una práctica por la que PP y Ciudadanos han pedido en reiteradas ocasiones explicaciones.

El silencio en torno a estas ayudas siempre ha sido la estrategia a seguir, incluso ayer cuando tanto la portavoz del PP en Les Corts, Isabel Bonig, y la de Ciudadanos, Mari Carmen Sánchez, hicieron referencia a esta cuestión después de conocerse que ACPV se reunió con el presidente catalán, Quim Torra, para coordinar una campaña en clave valenciana ante los juicios de los políticos presos catalanes.

«¿Por qué no destinan este dinero a las necesidades de los valencianos?, preguntó Bonig; «¿de verdad no saben para qué usan el dinero que les da la Generalitat valenciana? Para fletar autobuses para ir a la Diada y organizar actos con Arran», insistió Sánchez.

Bonig defendió que el dinero público vaya destinado a las muchas carencias que el Gobierno surgido del Pacte del Botànic no ha logrado solucionar. Las listas de espera en Sanidad, que han aumentado en más de 6.000 personas y superan las 60.000, las aulas prefabricadas en las que todavía estudian 11.000 alumnos en la Comunitat Valenciana, son algunas de las prioridades a las que la portavoz popular cree que hay dar preferencia, «y no a pagar la fiesta de los separatistas catalanes».

Por su parte, Mari Carmen Sánchez, incidió en que esta simpatía que PSPV y Compromís muestran hacia entidades catalanistas tiene que mucho que ver con el modelo de inmersión lingüística al que han llevado el sistema educativo valenciano. Denuncia que la Conselleria de Educación mantiene oculto el número de colegios en los que no se imparte ni una sola hora de castellano en la etapa de Infantil. «Eso es sectarismo».

El presidente Puig sí que respondió a esta acusación. Dijo que Ciudadanos trata de hacer esta cuestión un «conflicto permanente» y le preguntó a Sánchez si conoce algún niño en la Comunitat Valenciana que no sepa hablar castellano. Desde la bancada popular se oyeron varias afirmaciones: «¡Claro que sí» o «eso es lo que queréis”. A lo que el jefe del Consell respondió: «Pues que me lo presenten».

Por su parte, la vicepresidenta Mónica Oltra, volvió a negar que se den ayudas a entidades catalanistas. «Se dan por fomentar la lectura, o la narrativa... El problema es que el PP se las daba a sus amiguitos. Aquí hay convocatorias públicas a las que se presentan las asociaciones».

Además de esta cuestión hubo otra que copó la sesión de control de ayer. Las serias dificultades que ha encontrado el Gobierno de Pedro Sánchez para aprobar los Presupuestos Generales del Estado y la relación que este fracaso pueda tener con el adelanto de las elecciones autonómicas.

Sánchez y las elecciones

A Puig le gusta jugar al despiste en este asunto, pero ayer optó por dejar entrever que la legislatura llegará hasta el final. Aseguró que el Gobierno socialista hace todo lo posible para aprobar las cuentas y que son otros partidos lo que deben explicar por qué están en contra de medidas como subir el salario mínimo.

Al síndic de Podemos, Antonio Estañ, no le convenció la explicación y se quedó sin saber qué piensa hacer si no se aprueban los presupuestos, puesto que sin ellos, los de la Generalitat no salen.