Infraestructuras

Trenes con menos pasajeros, solución para asegurar la línea Xàtiva- Alcoi

Ni Gobierno ni Generalitat garantizan inversiones para mejorar el servicio

Sánchez de León y Bonig en la reunión con los alcaldes de la línea Xàtiva- Alcoi
Sánchez de León y Bonig en la reunión con los alcaldes de la línea Xàtiva- Alcoilarazon

La línea de tren Xàtiva- Alcoi se ha salvado por poco de entrar en la lista de aquellas que el Ministerio de Fomento considera demasiado caras para su mantenimiento.

La línea de tren Xàtiva- Alcoi se ha salvado por poco de entrar en la lista de aquellas que el Ministerio de Fomento considera demasiado caras para su mantenimiento. En 2014 se volverá a realizar un nuevo control sobre los datos de rentabilidad y por ello, tanto la Generalitat como los municipios afectados quieren tomar medidas para, como poco, mantener los datos actuales.

La solución, según apuntó el director de Transportes y Logística, Carlos Eleno, pasa por reducir la capacidad de los trenes. Así, el índice de ocupación subirá y también el coeficiente de aprovechamiento en el que se basa el Ministerio de Fomento para decidir si suprime o no una línea. Estos ferrocarriles garantizan también un menor consumo energético.

Las inversiones para modernizar la línea tendrán que esperar a tiempos mejores. Así lo confirmaron tanto la consellera de Infraestructuras, Isabel Bonig, como la delegada del Gobierno, Paula Sánchez de León.

Los Presupuestos Generales del Estado recogen 100.000 euros de inversión para este año, una cantidad ínfima para abordar todas las mejoras que requiere esta infraestructura. Bonig admitió que con este dinero lo único que puede llevarse a cabo son mejoras en las frecuencias y en los enlaces.

Los tiempos de recorrido son tan elevados que viajar de Valencia a Alcoy cuesta más que hacerlo de Madrid a Valencia en AVE. De hecho, las promesas para mejorar esta línea han sido tan reiteradas como incumplidas.

En julio de 2009 el entonces presidente de la Generalitat, Francisco Camps, y el ministro de Fomento, José Blanco, anunciaron un protocolo para destinar más de 60 millones a la inversión de esta línea. Cada Administración se comprometía a poner en marcha una parte de las actuaciones.

A día de hoy, los avances han sido mínimos y la consellera Bonig no tuvo más remedio que acogerse a las mejoras realizadas en la estación de Albaida, todavía por construir.

«Al menos el trayecto se ha salvado», insistió, «ahora vamos a poner en marcha un plan de mejora de la misma». Otra de las líneas que peligraban por la falta de rentabilidad es la que une Benidorm con Dénia. La consellera destacó que también se mantiene el servicio.