Un 65% menos de empresas piden ayudas desde que han de devolverlas

La coyuntura económica provocó que el año pasado la Generalitat decidiera transformar las subvenciones a fondo perdido para las empresas -los conocidos como Planes de Competitividad- en préstamos, también denominados Planes de Incentivos, que evidentemente las compañías deben devolver a la Administración.

El cambio ha tenido una consecuencia casi inmediata. Los números hablan por sí solos. En 2011, cuando las ayudas funcionaban aún como subvención, la Conselleria de Economía concedió un total de 2.264 contribuciones para proyectos empresariales. Esta cifra descendió hasta los 785 durante el año pasado, es decir, un 65,3 por ciento menos. En lo que llevamos de año se han presentado 414 solicitudes.

Desde la Conselleria explicaron que este descenso se debe también a que ahora el dinero de los programas va destinado a aquellos proyectos que «realmente generan riqueza y empleo».

Por ello, todas las empresas que se presentan a los programas del Instituto Valenciano de la Competitividad Empresarial (Ivace), deben presentar un plan de negocio que contemple los resultados y se pueda conocer si van a generar empleo y contribuir a crear prosperidad y crecimiento.

Además, según las mismas fuentes, dada la coyuntura actual estos programas cuentan con un menor presupuesto y algunas líneas han desaparecido. Es significativo el caso del Programa nacional Innoempresa. Este contaba con ayudas estatales y concentraba cerca del 25 por ciento de las subvenciones concedidas en 2011 (753). El Estado lo suprimió en 2011 pero desde la Generalitat se hizo un esfuerzo por mantenerlo con fondos propios. Finalmente en 2012 se suprimió.

No obstante, existe una línea en la que, no solamente no han descendido las peticiones, sino que se han incrementado. Es el caso de las ayudas a la internacionalización. En 2011 se concedieron un total de 1.303 mientras que el pasado la cifra ascendió hasta los 1.567 proyectos con un importe total de 7,62 millones de euros, lo que demuestra el claro interés de las empresas valencianas en estos momentos de crisis, por salir al exterior e intentar conquistar nuevos mercados.

La convocatoria para este año todavía no ha salido, se espera que se publique antes de verano, por lo que aún no se conoce el interés que despertará en las empresas en este momento.

El objetivo de estos préstamos es adaptar el sistema de ayudas públicas al contexto actual, que está marcado por la reducción de ingresos en la Administración debido a la desaceleración económica, por lo que es necesario ahorrar.