Ciudad Lineal

El pederasta de Ciudad Lineal elegía a sus víctimas

El presunto pederasta de Ciudad Lineal observaba a sus víctimas de entre 5 y 9 años antes para ver cuál se ajustaba más a sus preferencias

Imagen del pasado 18 de octubre de Antonio Ortiz durante el juicio en la Audiencia Provincial de Madrid
Imagen del pasado 18 de octubre de Antonio Ortiz durante el juicio en la Audiencia Provincial de Madridlarazon

El presunto pederasta de Ciudad Lineal observaba a sus víctimas de entre 5 y 9 años antes para ver cuál se ajustaba más a sus preferencias.

Aunque se cree que con la última niña no lo tenía preparado y actuó por un impulso al salir del gimnasio (la niña del 22 de agosto), a las otras menores puede que las eligiera bien. Eso se desprende de la declaración de uno de los agentes policiales que testificaron ayer en el juicio del «pederasta de Ciudad Lineal», donde Antonio Ortiz es el único acusado. El agente explicó que, tras tomar declaración a las menores que iban junto a la testigo protegido 3, agredida el 10 de abril, éstas aseguraron que el acusado preguntó por «Gloria», como efectivamente se llamaba una de las menores. Pero fue para decir: «No, ella», señalando a su víctima. La pequeña accedió tras escuchar que su madre ya sabía que tenía que ir con él a probar unos vestidos.

También ayer declaró el agente que acudió a la llamada de desaparición que realizó la madre de esta menor, donde explicaba que su hija había desaparecido.

El hecho de que Ortiz eligiera a sus víctimas ya fue apuntado por los agentes encargados de la «operación Candy», que siempre explicaron que el pederasta tenía un perfil bastante concreto. Buscaba a niñas sin desarrollar, de aspecto muy frágil y a menudo tenía predilección por las de origen asiático. Con una niña de origen japonés lo intentó pocos minutos antes de acudir al grupo de amigas de Gloria y de origen chino era también la agredida el 17 de junio mientras jugaba en la calle Luis Ruiz de la capital.