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Arte urbano de récord para el Mercado de la Cebada
La fachada del edificio y sus 4.860 metros cuadrados de cúpulas se convierten en el mayor mural de España
La fachada del edificio y sus 4.860 metros cuadrados de cúpulas se convierten en el mayor mural de España
Uno de los edificios más bohemios de la capital, el Mercado de la Cebada, va a sufrir una gran transformación. Y es que, tras casi 140 años de historia, tanto su fachada como parte de su interior van a llenarse de color gracias al colectivo artístico Boamistura que el próximo 16 de octubre dará por finalizada su intervención en este emblemático edificio, convirtiéndola en una de las mayores obras de arte urbano del mundo, y la mayor de España, en la que se han cubierto 6.000 metros cuadrados de superficie y se han empleado 2.000 kilos de pintura, 40 rodillos extensibles y alrededor de 1.000 horas de trabajo de un equipo de 15 personas que han trabajado de sol a sol durante todo este tiempo, sin entender de domingos ni de días festivos.
Boamistura está formado por cinco jóvenes madrileños, del barrio de la Alameda de Osuna, que comparten desde su adolescencia la pasión por pintar, y lo que comenzó siendo un grupo de chavales aficionados a los graffittis ha terminado siendo un colectivo artístico que ha trabajado en ciudades como Nueva York, Venecia, Ciudad del Cabo, Manchester entre otras. Javi, es arquitecto y uno de los artistas que integran este grupo formado por un diseñador gráfico, un licenciado en Bellas Artes o un ingeniero de caminos. Bajo su punto de vista, el Mercado de la Cebada era el lugar ideal para transmitir optimismo, «este mercado es uno de los edificios más emblemáticos del centro de Madrid, sobretodo por el barrio donde está, La Latina y su ambiente bohemio le aporta más encanto aún, y todo esto unido al proceso de decadencia en el que se encontraba lo hacía el ideal para darle un punto de optimismo y para esta iniciativa» –añade– «tenía todo el sentido del mundo cambiarlo y darle un toque de color a este barrio». Javi cree que a la capital aún le falta avanzar unos pasos más en lo que a cultura urbana se refiere, «Madrid sigue siendo aún una ciudad un poco hostil para trabajar, cada vez que queremos sacar un proyecto adelante nos encontramos con trabas que quizás en otras ciudades mas liberales, o con una mente más abierta en cuanto a estos temas no nos encontramos». A pesar de todo, tanto él como sus compañeros se muestran muy ilusionados ante esta remodelación.
Anaformismo mirando al cielo
Las imponentes cúpulas de este edificio son el elemento fundamental de este gran mural, ocupan 4.860 metros cuadrados y cada una de ellas está pintada de un color muy llamativo, «queríamos reflejar los alimentos que se pueden ver en los puestos del mercado, reflejar el día a día de su actividad». El entorno no invitaba a otra cosa, ya que desde lo alto del edificio se pueden divisar las cúpulas de lugares tan importantes como la iglesia de San Francisco El Grande, la Iglesia de San Andrés, e incluso un poco mas alejada las cúpulas de la catedral de La Almudena y las cinco del Mercado de la Cebada pasaban absolutamente desapercibidas, hasta ahora. Para Boamistura era fundamental darles el protagonismo que se merecían: «El impacto sobre el paisaje es muy importante. No sólo se las ve desde la calle, la creación de efectos de iluminación, colores y matices estarán presentes también y muy visibles, en la vida de los tejados, bares y terrazas de La Latina». Pero Boamistura no podía dejar esta gran obra sin darle uno de sus toques mas característicos, y es que los colores de las cúpulas sirven de soporte para que se pueda leer la palabra «Color», escrita en blanco mediante la técnica del anaformismo, que consiste en que esta palabra sólo puede ser vista desde un punto de vista en concreto, en este caso desde la cúpula de color azul, desde otros puntos tan sólo se ve trazos blancos abstractos.
Por último, por la parte del exterior del mercado, donde se encuentra la puerta principal, podrá leerse el lema principal de esta iniciativa: «Llena la vida de color», en grandes letras, de colores muy vivos, como no podía ser de otra manera, para transmitir optimismo a todas las personas que pasen por allí.
Pero no sólo el exterior del Mercado de la Cebada va a ser remodelado, también su interior va a experimentar un cambio radical y contará con un espacio abierto al público que estará dedicado a las diferentes expresiones del optimismo. Las actividades que allí se podrán realizar estarán relacionadas con la música, el cine o el diseño de moda entre otras, será un escaparate para todos los jóvenes emprendedores que quieran mostrar sus ideas y proyectos, y así poder llevarlos a la realidad en una época más complicada de lo normal. Además, se ofrecerán conferencias y charlas con personas y grupos de personas que han logrado abrirse camino en alguno de estos campos y que quieren compartir su experiencia. Todas las actividades que allí se organicen estarán abiertas al público, aunque ante la previsible demanda tendrán un aforo limitado.
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