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Botella pide modificar la ley para que se cumplan los servicios mínimos

Ana Botella, durante la rueda de prensa que ha ofrecido esta tarde tras anunciarse la desconvocatoria de la huelga de limpieza
Ana Botella, durante la rueda de prensa que ha ofrecido esta tarde tras anunciarse la desconvocatoria de la huelga de limpiezalarazon

«Es necesario abordar la elaboración de una ley de huelga que ponga freno a los perjuicios que sufren los ciudadanos», afirmó ayer la alcaldesa de la capital, Ana Botella, tras confirmarse el fin de la huelga del servicio de limpieza y jardines de la ciudad. Tras anunciar la suspensión de las medidas extraordinarias para garantizar el cumplimiento de los servicios mínimos, cuyo trabajo impedían los piquetes, a a través de la empresa pública Tragsa, Botella apuntó que «no se puede aceptar el incumplimiento sistemático de los servicios mínimos que afectan a servicios esenciales y no es posible que la convivencia, ante un derecho constitucional como la huelga se pueda ver afectada hasta límites intolerables». En este sentido, recordó que la normativa actual que regula el derecho de huelga se basa en un real decreto de 1977, antes de la Constitución, cuya modernización es una necesidad perentoria. «Los ciudadanos no pueden volver a ser rehenes de un conflicto como el que ha finalizado», sentenció la regidora, que agradeció a los madrileños su paciencia ante el «intento deliberado de dejar nuestras calles más sucias de lo normal».

Botella reiteró que el gasto derivado tanto de la acción de los piquetes –que ha provocado desperfectos en contenedores, cubos, papeleras y demás mobiliario urbano valorados en más de medio millón de euros– como del recurso a Tragsa por el incumplimiento de los servicios mínimos y la necesidad de reforzar la seguridad de los trabajadores de limpieza que los efectuaban –el Ayuntamiento de Madrid ha calculado que la Policía Municipal ha realizado 8.716 horas extraordinarias por este motivo– se cobrarán íntegramente a las empresas adjudicatarias. «Ni un solo euro de los costes de esta estrategia de intimidación repercutirá en los bolsillos de los madrileños», aseguró. Del mismo modo, confirmó que el consistorio madrileño seguirá adelante con la denuncia efectuada ante la Fiscalía sobre la actuación de los piquetes el pasado viernes.

Respecto al acuerdo entre la patronal de limpieza viaria y los sindicatos, la alcaldesa felicitó a las partes que se han sentado en la mesa de negociación, así como a los trabajadores del servicio, y consideró que la reforma laboral llevada a cabo por el Ejecutivo de Mariano Rajoy ha sido determinante para lograr una solución consensuada. «La reforma laboral permite mayor flexibilidad para poder reducir los costes laborales sin tener que recurrir a los despidos», señaló.