Patrimonio
Cae un Gordo de 1,2 millones en la Real Fábrica de Tapices
La histórica entidad recibe un encargo del Gobierno de Sajonia para realizar 32 tapices. Hace un año la entidad estaba abocada al cierre
Hace justo un año estaban abocados al concurso de acreedores con una deuda de 6,3 millones de euros y ahora acaban de recibir el «encargo más grande de los últimos 200 años». Se trata de la Real Fábrica de Tapices y los 32 tapices que el Gobierno de Sajonia (Alemania) les ha solicitado por un importe de 1,2 millones de euros. Tras un concurso público internacional, la histórica institución –fundada en 1720– logró este encargo, que supone la reproducción de las obras que se quemaron en los bombardeos de Dresde en la Primera Guerra Mundial.
La Real Fábrica ha experimentado «un gran auge económico, laboral y productivo» que permite a esta institución seguir creando «con el mismo arte de hace 296 años, y conservando con el máximo rigor» los bienes textiles del patrimonio español, manifestó el Ayuntamiento de Madrid ayer en un comunicado. El administrador general de la Fábrica, Alejandro Klecker, realizó ayer una visita para mostrar los proyectos de presente y futuro de la entidad. Convertida en Fundación, de la que forman parte el Ayuntamiento, la Comunidad y el Ministerio de Cultura, la Fábrica de Tapices está gestionada por un Patronato. Desde junio del año pasado, su presidenta de turno es la delegada de Cultura y Deportes, Celia Mayer, quien ha subrayado la importancia de rescatar y sanear esta institución por su valor histórico, cultural y artístico. «Su labor en la divulgación y conservación del legado histórico es prioritaria, para el patrimonio madrileño y español», señaló Mayer.
Mejoras laborales
La Comunidad, por su parte, puso de manifiesto que el apoyo de las tres instituciones ha permitido abonar los sueldos pendientes de los trabajadores y aumentar la plantilla de 36 a 60 empleados antes de fin de año. El Gobierno regional ha invertido 728.375 euros entre 2015 y 2016, y destinará una partida de 500.000 euros para 2017. La representante de la Comunidad de Madrid en el Patronato, María Pardo, destacó que la Administración regional «se está volcando en todos los sentidos porque hay un valor inmaterial que fortalecer y que tiene que permanecer, que es la labor de estos artesanos».
Otra de las obras que también ha sido ganada por concurso público internacional es la producción de uno de los tapices más grandes del mundo. Se trata de un tapiz de 21 metros cuadrados de extensión que representa la masacre de Sabra y Chatila y cuyo encargo corresponde a la comunidad libanesa residente en Londres. En su cartera figuran también trabajos para las catedrales de Sigüenza, Córdoba y Valencia, el Museo Cerralbo y solicitudes de particulares, entre otros. La creación en 2016 de una Unidad de Restauración de Telas ha dado sus frutos, ya que han acometido encargos de la Capitanía General de Madrid, según el Ayuntamiento. La Real Fábrica de Tapices tiene como finalidad «mantener vivos oficios que están en vía de desaparición, conservar y divulgar los tesoros artísticos históricos, y mantener la tarea de reproducir los diseños de autores contemporáneos, como ya se hizo en el siglo XX, con obras de José María Sert, Manuel Viola, Picasso o Dalí, entre otros célebres pintores».
En octubre de 2015, la Fábrica estaba abocada al concurso de acreedores, con una deuda de 6,3 millones de euros. Tras su reestructuración se ha logrado reducir esta cifra a 4,7 millones de euros, de los cuales 3,2 millones de euros corresponden al principal de la deuda bancaria. Se ha cumplido con los pagos a la Seguridad Social y liquidado los impuestos atrasados con Hacienda.
✕
Accede a tu cuenta para comentar