Carlos: «En las últimas semanas sólo he podido ir dos días a clase»

Está en quinto de carrera y, en el último mes, se ha tenido que quedar dos semanas en casa ante la imposibilidad de ir solo a clase. Carlos es uno de los ocho afectados por la eliminación del servicio de acompañamiento para discapacitados físicos de la Complutense y uno de los pocos que ha podido regresar a las aulas donde estudia Filología inglesa al menos dos días. Gracias a la ayuda de la ONCE, a los que, explica, recurrió in extremis, ha conseguido compañía para utilizar el transporte público de su casa a la facultad, aunque sólo cuando éstos están disponibles. «Dentro del campus nos siguen acompañando los becarios de la oficina del discapacitado, pero la vicerrectora nos dice ahora que, por ley, ya no pueden venir con nosotros hasta casa», explica. Como Carlos, los afectados por este contratiempo están indignados por el momento en que se ha tomado la decisión de quitar el servicio: «Ha sido de un día para otro, sin previo aviso. No es normal que ocurra esto en las dos últimas semanas del curso, antes de los finales», se queja este joven, que aún no sabe muy bien lo que pasará el año que viene.