Comunidad de Madrid

Cifuentes, presidenta del PP de Madrid en primera vuelta

Se impuso a Asúa con el 86,38% de los votos, que la proclaman candidata única al XVI Congreso regional

Cristina Cifuentes celebró el triunfo en la sede de Moncloa-Aravaca, donde depositó su voto por la mañana
Cristina Cifuentes celebró el triunfo en la sede de Moncloa-Aravaca, donde depositó su voto por la mañanalarazon

Se impuso a Asúa con el 86,38% de los votos, que la proclaman candidata única al XVI Congreso regional

Con un 86,38% de los votos de los afiliados inscritos para participar ayer en la primera vuelta de las primeras elecciones primarias para elegir al próximo presidente del PP de Madrid mediante el sistema un militante, un voto, se proclamó ayer candidata única la ex presidenta de la gestora del partido y líder del Ejecutivo regional, Cristina Cifuentes. Para conseguirlo, la aspirante debía de conseguir al menos el 50% más uno de los votos y una diferencia de quince puntos con su rival, Luis Asúa. A falta de que el Comité Organizador el Congreso proclame los resultados definitivos, Cifuentes superó a Asúa ampliamente en los municipios –90,9% frente al 9,1%–, y por un menor margen en los distritos –76,5% frente al 23,5%–, de los cuales Villa de Vallecas fue el único en el que venció su rival, según afirmó su presidenta Eva Durán. La participación fue del 74,8% de los 10.088 personas inscritas para participar en las primarias; es decir 7.545 afiliados acudieron ayer a las urnas.

«Los militantes nos han dado un mandato claro: quieren un partido que mire al futuro, abierto y participativo para seguir creciendo», dijo ayer tras conocer los resultados. Por su parte Asúa consideró un «éxito» su resultado ya que se había propuesto superar el 10% de los votos y explicó que ahora volverá a «recuperar» su militancia de base «humilde».

El camino de Cifuentes a la cúpula del PP madrileño no ha sido tan meteórico como sus resultados en esta votación. Han sido necesarios tres años de transición dentro del partido regional que, con estas primarias, ha dejado atrás definitivamente doce años de «aguirrismo», que llevaron a lo más alto a los populares y que han terminado envueltos entre sombras de corrupción y con convulsas salidas como la de Ana Botella del Ayuntamiento de Madrid e Ignacio González de la Comunidad.

Su ascenso comenzó en la campaña de las elecciones europeas de 2014. El PP de Madrid aún se recuperaba del impacto de la «trama Púnica», que había llevado hasta la cárcel de Estremera a su ex secretario general, Francisco Granados. Gobernaban Comunidad y Ayuntamiento Ignacio González y Ana Botella tras la salida de Alberto Ruiz-Gallardón –para ser ministro de Justicia– y de Esperanza Aguirre –por motivos personales–. Génova buscaba un tándem ganador para los comicios autonómicos y municipales de 2015 y no tenía claro quién debía progragonizarlo. Ignacio González y Aguirre dieron un paso al frente para postularse.

El cambio de rumbo

Los resultados electorales europeos, que revelaron el coste que los casos de corrupción estaban teniendo para el PP, aceleraron las quinielas durante el verano. Que sonarán nombres como el de Pablo Casado o Soraya Sáenz de Santamaría para el Ayuntamiento de Madrid, mientras María Dolores de Cospedal instaba a «dar un paso adelante» a quien quisiese presentarse, y se ignoraran los méritos de la todavía alcaldesa, Ana Botella, llevó a ésta a retirarse antes de que Rajoy tomase una decisión.

El «aguirrismo» confiaba en que el tándem Aguirre/ González mantendrían al PP tanto en Cibeles como en Sol. Sin embargo, Génova vio en Cifuentes la renovación que la «nueva política», que se arrogaban Ciudadanos y Podemos, reclamaba. Por entonces, Cifuentes ya estaba demostrando tener arrestos en la Delegación del Gobierno después de seis legislaturas como diputada en la Asamblea de Madrid.

Finalmente Cifuentes fue –en detrimento de González– la elección del presidente del PP, pese al tsunami que aquello levantó en Madrid. La lucha entre «aguirristas» y los prácticamente inexistentes «cifuentistas» protagonizaron toda la campaña empezando por la elaboración de las listas bajo el criterio de Aguirre, aún presidenta del PP de Madrid. Sin embargo, las elecciones municipales y autonómicas de mayo de 2015 dieron la vuelta a todo. La presidenta popular ganó pero no logró alcanzar un pacto de Gobierno, mientras que Cifuentes aseguró la Presidencia de la Comunidad.

Durante los días que siguieron al varapalo «aguirrista», en la primera planta de Génova 13 nadie cogía el teléfono. El secretario general, Ignacio González, y los que habían sido escuderos de Aguirre en el partido se fueron yendo sin dejar directrices para los nuevos pactos que se forjaban en los ayuntamientos e incluso en la Comunidad. El entorno de Cifuentes fue tomando las riendas extraoficialmente y la Dirección nacional comenzó a plantearse el relevo.

Para cuando, en febrero de 2016, Esperanza Aguirre dimitió, su segundo de abordo había abandonado la secretaría general un mes antes. Rajoy decidió volver a confiar en Cifuentes, si bien dejó claro que la opción de mantener la Dirección del partido en Madrid separada de la Presidencia de la Comunidad –como ocurría antes de la «era Aguirre»–, estaba sobre la mesa. Es por ello que, aunque todos sabían que la presidenta regional no dejaría escapar la oportunidad, hasta hace un mes no se presentó como candidata.

Durante estos últimos meses, Cifuentes ha recorrido las sedes para recuperar el contacto con los afiliados y se ha embarcado en una campaña para captar nuevos valores para el PP.

Apoyada por Génova

A pesar de que Cristina Cifuentes no quiso desvelar el nombre de de ninguno de los 3.706 avales que presentó para librar la «batalla» por presidir el Partido Popular en la Comunidad de Madrid, fuentes populares precisaron que entre los apoyos que recibió para enfrentarse a su rival en las primarias de ayer había tres ministros: Cristóbal Montoro, Alvaro Nadal e Íñigo Méndez de Vigo; así como el presidente del Senado y presidente de Honor del PP de la Comunidad de Madrid, Pío García Escudero. También contó con el apoyo de la mayoría de los alcaldes madrileños, como el de Alcorcón, David Pérez, o el de Boadilla del Monte, Antonio González Terol.

El perfil

De Nuevas Generaciones a dirigir el PP de Madrid

La futura presidenta del PP de Madrid se afilió a Nuevas Generaciones de entonces Alianza Popular cuando tenía 16 años en 1980 y después de terminar la carrera y superar una oposición de Técnico Superior de la Universidad Complutense de Madrid, comenzó a encadenar cargos en el partido, siendo diputada de la Asamblea desde 1991 hasta 2012, año en que fue designada delegada del Gobierno en Madrid. En 2015, optó a la presidencia de la Comunidad de Madrid en las elecciones autonómicas y, en febrero de 2016, sustituyó al frente de una Comisión gestora a Esperanza Aguirre en el PP madrileño. Dentro del partido ha desempeñado distintas responsabilidades como miembro del Comité de Dirección, del Comité Ejecutivo y de la Junta Directiva Regional del PP de Madrid, entre las que están la presidencia del Comité de Derechos y Garantías y la Secretaría Ejecutiva de Política Territorial. Precisamente en este último puesto coincidió con sus máximos colaboradores en la actualidad, Ángel Garrido y Jaime González Taboada, quienes se espera ocupen cargos significativos en la nueva Ejecutiva del PP de Madrid que Cifuentes debe presentar a los afiliados el próximo 18 de marzo, durante la celebración del Congreso regional.