Policía

Detenido el violador de Chamberí

La Razón
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Víctor Rodolfo Huamancoli Torres solía actuar de noche. Este peruano de 32 años tenía fijación por las jóvenes veiteañeras, a quienes abordaba generalmente los fines de semana al volver las chicas de fiesta. A veces trataba de darles conversación pero, si ellas no le prestaban mayor atención, las seguía disimuladamente hasta el portal de sus viviendas, donde las abordaba y forcejeaba con ellas hasta consumar el hecho. El individuo, ya detenido, está acusado de, al menos, cuatro violaciones y dos agresiones sexuales a mujeres de 21, 22, 24, 27, 29 y 33 años, la mayoría de ellas de origen español, según fuentes policiales. Su área de actuación eran los distritos de Moncloa y Centro, donde hay gran concentración de bares de copas. Aunque solía cometer sus deplorables delitos en el portal de las viviendas de las mujeres, en una ocasión consumó la violación en el interior del domicilio de la víctima, hasta donde la siguió y consiguió entrar, según declaró la víctima ante la Policía.

Por eso, al violador también se le imputa un delito de allanamiento de morada. Otro de los delitos que se le imputan, que fue precisamente el que le llevó a ser descubierto, es uno de robo con fuerza. Y es que, en uno de sus intentos de agresión sexual, quitó el teléfono móvil a su víctima y no tuvo inconveniente alguno en utilizarlo como su fuera suyo. Desde ese terminal realizaba y recibía llamadas, por lo que para los agentes fue bastante facil «triangular» su posición gracias a las antenas de telefonía móvil. En aquella ocasión no logró consumar la violación debido a la fuerte resistencia y los gritos de auxilio de la víctima. Además, el robo del móvil fue determinante para la Policía, que llevaba tiempo detrás del peruano.

La investigación comenzó a finales de 2010, a raíz de la denuncia interpuesta por una joven de 21 años que manifestaba que, cuando se disponía a entrar en el portal de su domicilio, un individuo le abordó por la espalda y, a empujones la introdujo en su domicilio, donde consumó la violación. Posteriormente se fueron sucediendo las denuncias de varias chicas que relataban el mismo modus operandi y aportaban una serie de características físicas que coincidían plenamente con las del autor de la primera agresión.

Una vez que se logró identificar al violador (en una de las conversaciones telefónicas localizaron el domicilio de su madre tras llamarle ésta «hijito»), las víctimas le reconocieron en unas fotografías sin ningún género de dudas. Los agentes de la Policía Nacional acudieron a su domicilio, en el número 24 de la calle Andrés Mellado, en Chamberí. El arresto se produjo el pasado 12 de julio. Una vez en dependencias policiales de la Jefatura Superior de Madrid, el detenido se negó a realizar las pruebas de ADN previstas para este tipo de delitos, aunque el juez instructor ordenó posteriormente su ejecución de las mismas. Al arrestado ya contaba con un antecedente policial previo, en 2002, por un delito de agresión sexual. La investigación ha sido llevada a cabo por agentes de la Brigada Provincial de Policíal Judicial de la Jefatura Superior de Policía de Madrid.