El callejero republicano de Getafe

El Gobierno de Manuela Carmena, en uno de los puntos de su programa electoral y que mucho ha dado que hablar en los meses precedentes, habla de aplicar a rajatabla la Ley de Memoria Histórica.

El Gobierno de Manuela Carmena, en uno de los puntos de su programa electoral y que mucho ha dado que hablar en los meses precedentes, habla de aplicar a rajatabla la Ley de Memoria Histórica. El equipo de Ahora Madrid no tardó en seleccionar las calles que sufrirán el cambio. 27 de ellas cambiarán su actual nomenclatura en una primera fase –que afecta a 16 distritos– de un plan para modificar el callejero que continuará después del verano, y hasta final de año, afectando a más vías y plazas de la ciudad. Entre los cambios propuestos hay nombres de escritores como Max Aub por general Dávila, el sindicalista Marcelino Camacho por paseo general Muñoz Grandes o, en algunos casos, recuperarán su antigua denominación.

La Ley de la Memoria Histórica nació con el objetivo de eliminar los vestigios de la Guerra Civil y el periodo franquista y cerrar una etapa de la historia reciente de España y las heridas que desde entonces siguen abiertas. Pero muy cerca de Madrid, concretamente en la localidad de Getafe, la toponimia de sus calles no olvida este periodo histórico. Las calles del barrio residencial de Buenavista, distrito que fue levantado a finales de los años 70 coincidiendo con la primera alcaldía socialista de la localidad, cuentan con casi medio centenar de calles que recuerdan a la II República. Hay vías de este distrito que están dedicadas a las Milicias Republicanas o al Quinto Regimiento, ambos cuerpos voluntarios de milicianos del Frente Popular. No obstante no es el único recuerdo a estas guerrillas; junto a ellas aparecen famosos guerrilleros y generales del bando republicano.

En concreto 17 calles entre las que se encuentran los nombres del General Miaja, del General Rojo o el General Juan Modesto. La mayoría de estos milicianos que participaron en la guerra, nada tienen que ver con la historia de la propia ciudad ni son autóctonos de la misma.

Rosario Sánchez Mora (Villarejo de Salvanés), más conocida como la Dinamitera, Mika Feldman (Argentina) la Capitana o la calle de Buenaventura Durruti (León), que encabezó la columna de milicianos de Aragón para tomar Zaragoza y con actuaciones también en Madrid, en la zona de Ciudad Universitaria, son sólo algunos ejemplos de calles del barrio. Las propias milicias cuentan con dos vías dedicadas una al Quinto Regimiento y otra al propio cuerpo de milicianos del Ejército Popular.

El artículo 15.1 de la ley dice que las Administraciones públicas «(...) tomarán las medidas oportunas para la retirada de escudos, insignias, placas y otros objetos o menciones conmemorativas de exaltación, personal o colectiva, de la sublevación militar, de la Guerra Civil y de la represión de la Dictadura». Algunos autores como Paul Preston, historiador e hispanista británico, data los crímenes producidos por la retaguardia republicana en aproximadamente 50.000 personas. La Ley de Memoria Histórica se creó para cerrar heridas; para la reconciliación y concordia, para acabar con el espíritu revanchista, que fue el fin con el que nació allá en 2007.

Pero no todos los nombres son de personas que combatieron en los frentes. Hay calles que mencionan a políticos republicanos y a líderes comunistas como Juan Negrín, Pedro Checa que durante la guerra fue uno de los líderes del PCE, Santiago Casares Quiroga, que fue criticado por los suyos por no querer armar a los obreros, e incluso hay una calle dedicada al primer lehendakari en 1936, José Antonio Aguirre. El líder del Partido Comunista, Santiago Carrillo y Dolores Ibárruri, «la Pasionaria», también cuentan con su propi toponímico en el barrio.

La ciudad, desde 1979, comenzando el periodo constitucional, ha sido gobernada por el partido socialista a excepción de los años 2001 a 2015 que contó con Juan Soler del Partido Popular, al frente. En la actualidad Sara Hernández del PSOE, secretaria general del partido socialista en Madrid, es la alcaldesa con el apoyo de Ahora Getafe. Hernández ha tratado de retirar una placa en el Cerro de los Ángeles que recuerda su profanación en agosto de 1936, en supuesto cumplimiento de la Memoria Histórica. Al ser un recinto de la Iglesia el consistorio getafense no tiene competencias.