El profesor seguirá libre pese a todos los indicios en su contra

El juez Hermenegildo Barrrera Aguirre ha rechazado los recursos interpuestos contra la libertad del profesor del colegio Valdeluz Andrés Díez, acusado de varios delitos de abusos sexuales contra ex alumnas. De esta forma, confirma la libertad provisional del mismo que acordó el pasado 14 de abril. Ahora, será la Audiencia Provincial de Madrid la que tenga la última palabra, ya que el fiscal ha recurrido ante ella, lo mismo que harán las acusaciones personadas.

En el auto del magistrado, al que ha tenido acceso LA RAZÓN, el magistrado reitera que no concurre ninguno de los requisitos exigidos por la ley para mantener en prisión provisional al docente. Y ello, afirma el juez, pese a considerar la existencias de indicios suficientes «para poder afirmar que el imputado podría ser autor de los hechos que se le imputan, si bien podría haberse producido cierta variación en las circunstancias, al constar informes elaborados por la clínica médico forense sobre la verosimilitud o no de ciertas declaraciones prestadas por las denunciantes».

Por otro lado, el magistrado incide en que el peligro de riesgo de fuga ha disminuido incluso desde que se decretó su libertad provisional. «En estos momentos debe manifestarse que el riesgo de fuga es mínimo, puesto que se impusieron al imputado ciertas medidas para garantizar su presencia en el procedimiento, que cumple escrupulosamente, habiéndose entregado el pasaporte por parte del mismo».

Por otr o lado, el instructor de la causa considera que la seguridad de las denunciantes está «garantizada» por la medida de alejamiento que se le impuso, tanto respecto a las menores como del centro escolar y la academia donde impartía clases de música.

Junto a ello, el juez reitera que no hay riesgo de que pueda obstaculizar de algún modo la investigación, tanto judicial como policial, como sostienen algunas acusaciones. En este punto, destaca que en el momento actual del procedimiento «resulta inviable mantener una situación de prisión tomando como fundamento tal afirmación, ya que policialmente no se ha desarrollado ninguna otra investigación, ni nada se ha solicitado por parte de la Brigada a este juzgado, y en cuanto a la labor jurisdiccional, prácticamente ha concluido la toma de declaraciones».

Y, junto a todo ello, alude a que la prisión provisional no tiene como finalidad «anticipar la pena que en su día pueda imponerse, sino garantizar» la presencia en el procedimiento, lo que estaría asegurado.