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El Rayo al rescate de Carmen
Carmen, de 85 años, fue desahuciada el viernes porque avaló con su vivienda un prestamo contraído por su hijo. El Rayo Vallecanos se comprometió ayer a financiar un alquiler social y recaudar dinero para cubrir sus necesidades Jugadores y cuerpo técnico aportarán ayudas económicas y las entradas del partido Rayo-Sevilla serán para la causa
Carmen, de 85 años, fue desahuciada el viernes porque avaló con su vivienda un prestamo contraído por su hijo. El Rayo Vallecanos se comprometió ayer a financiar un alquiler social y recaudar dinero para cubrir sus necesidades Jugadores y cuerpo técnico
Una vez más sale el lado más solidario del fútbol. El club Rayo Vallecano no se ha quedado de brazos cruzados ante la terrible situación que vivió el pasado viernes Carmen Martínez Ayuso, la mujer de 85 años que perdió su casa por ayudar a su hijo. La entidad se ha comprometido a auxiliar a la anciana para que no se quede en la calle.
Carmen Martínez llevaba 50 años viviendo en el número 10 de la calle Sierra de Palomeras, en el barrio de Entrevías, distrito Puente de Vallecas, hasta que un día se enteró de que debía abandonar su hogar. El origen del desahucio se remonta a hace cuatro años, cuando su único hijo, Luis Jiménez, solicitó un préstamo de 40.000 euros a un particular que fue avalado por la vivienda de su madre. Luis no pudo devolver esa cantidad, que ascendía ya a 70.000 euros por los intereses abusivos, y el prestamista se quedó con la casa, la cual subastó tiempo después. El nuevo propietario del inmueble acudió a la Justicia para disponer de su adquisición.
El juez firmó la orden de desahucio para octubre, pero se paralizó gracias a los activistas de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) de Vallecas. Tras una prórroga de un mes, el segundo intento se hizo efectivo el viernes pasado y Carmen tuvo que abandonar la casa en la que había vivido tantos años. La octogenaria cobra una pensión mínima de 630 euros y tiene diversos problemas de salud, propios de su edad.
Cuando parecía todo perdido, apareció el Rayo Vallecano. No es el club con más presupuesto de la Liga Española de Fútbol, ni siquiera el segundo, pero siempre se ha caracterizado por ser un equipo cercano y comprometido con sus vecinos del barrio de Vallecas. Una de las consignas de su afición es «¡Que viva el Rayo de la clase obrera!». El entrenador del Rayo, Paco Jémez, salió ayer en la rueda de prensa, habitual, para dar la previa del partido que hoy se jugará en Vallecas. Sin embargo, Jémez anunció que el club –desde jugadores, cuerpo técnico hasta el presidente–, iban a ayudar a Carmen con su difícil situación. «Nosotros no nos vamos a quedar parados, la vamos a ayudar», dijo.
La historia de Carmen ha tocado en la entidad franjirroja que como afirmó su entrenador «hay muchas familias que lo están pasando mal y no hay nada más duro a que te echen de tu casa». Jémez explicó que desde el primer momento tuvieron claro que iban a ayudar «dentro de nuestras posibilidades». Los jugadores fueron los primeros que dieron el paso y presidente y cuerpo técnico no dudaron a la hora de buscar soluciones desde el club. «Le vamos a buscar un sitio donde vivir y vamos a abrir un canal para la gente que le quiera ayudar», aseguró el técnico del Rayo. Jémez finalizó afirmando que «somos muy sensibles con estos temas porque nos puede pasar a cualquiera y donde no llegan las instituciones, vamos nosotros». «Vamos a dar un paso adelante para que Carmen viva dignamente», terminó. El club anunció que parte de la taquilla del partido Rayo-Sevilla, que se jugará el día 7 de diciembre, se recaudará para la causa, así como que cada integrante ayudará económicamente.
Además del Rayo Vallecano, son muchas las muestras de cariño que han recibido Carmen y su familia. Los vecinos del barrio madrileño se han volcado con ella y se han ofrecido para pagarle la luz, el agua o lo que haga falta, según explicaron miembros de la plataforma. La PAH también ha recibido llamadas desde México, donde les solicitaron un número de cuenta para ayudar a Carmen económicamente.
También se pusieron en marcha los servicios sociales, para que no le falte nada y solucionar sus problemas. Ya el mismo día del desahucio, Samur Social le ofreció ayuda o una vivienda social, pero Carmen les explicó que por el momento se quedaba en casa de un familiar, su nieto Luis. La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, aseguró a su vez que se están tomando «medidas para proteger a las personas que son desahuciadas». Por su parte, el Ministerio de Economía y Competitividad hará las gestiones necesarias para que la anciana reciba una vivienda en alquiler cerca del domicilio de donde fue desahuciada a través del Sareb o del Fondo Social de Vivienda.
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