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Elegancia y glamour: arranca la temporada en el Hipódromo de la Zarzuela
El Hipódromo de la Zarzuela de Madrid vuelve, una temporada más, a su cita con las carreras ofreciendo, no sólo la pasión por los caballos y el tirón de las apuestas, sino también una oferta variada de ocio para toda la familia.
El emblemático hipódromo madrileño, que permaneció cerrado entre 1996 y 2005, ha puesto en marcha, de manos de sus nuevos propietarios, un ambicioso proyecto para hacer que las carreras y el interés por los caballos lleguen al gran público.
En un calendario de competiciones que se alargará hasta casi los 50 días, con carreras matinales, vespertinas y nocturnas, el recinto madrileño quiere asemejarse a los grandes circuitos del panorama europeo.
A diferencia del muy célebre circuito inglés de Ascot, el Hipódromo de la Zarzuela no aspira a ser conocido por las pamelas llamativas y extravagantes y la etiqueta de las chisteras. Hoy en el circuito madrileño lo que abundaba eran los abrigos de pieles, los sombreros y los conjuntos de caza tipo loden.
En un evento que se anunciaba en los carteles con un apelativo muy inglés, "Madrid Horseracing Experience", no podían faltar, lógicamente, los aficionados de toda la vida a la hípica, como el filósofo Fernado Savater, apasionado y verdadero erudito del mundo de los caballos.
"El inicio de la temporada de turf en Madrid es una gran alegría para los aficionados a los caballos. Para los que vimos languidecer el Hipódromo de la Zarzuela es una excelente noticia verlo resurgir con tanta fuerza. Este curso hay grandes caballos y excelentes jinetes, lo que garantizará un espectáculo de primer nivel", dijo Savater en una charla con Efe.
"Empecé en las carreras con mi padre, con cinco años -añadió-, así que creo que es importante que los niños y jóvenes vengan al Hipódromo y se empapen de todo esto".
Además de las carreras, el Hipódromo de la Zarzuela ofrecerá a sus visitantes una gran variedad de actividades lúdicas que van desde conciertos hasta festivales de moda, pasando por exposiciones o jornadas temáticas.
"Hemos dado un salto adelante que nos sitúa en el panorama internacional y que nos sirve para atraer a gente de primer nivel del mundo de la hípica", contaba a Efe Faina Zurita, presidenta del Hipódromo de la Zarzuela.
"Tendremos, además, una atractiva oferta gastronómica, cultural y de ocio, a la par que las carreras de caballos -añadió-. El Hipódromo ofrecerá planes de ocio para toda la familia".
Situado a apenas ocho kilómetros del centro de la capital, el circuito madrileño contará esta nueva temporada con tres pruebas "Listed"(reuniones internacionales): el Gran Premio de Madrid (30 de junio), el Gran Premio de la Hispanidad (13 de octubre) y el Memorial Duque de Toledo (27 de octubre).
Gracias a estas pruebas, el Hipódromo de la Zarzuela confía en dar el salto cualitativo necesario para ser un referente en España y destacar en Europa. El recinto recupera, veinte años después, las carreras de obstáculos, un reclamo más para los aficionados, ávidos de carreras de este tipo desde que se reabrió la Zarzuela en 2005.
"El turf en España está evolucionando mucho en los últimos años. Me parece perfecto que empiecen a ofrecer en Madrid una oferta de ocio así; esto supondrá que las carreras podrán llegar a familias enteras, a jóvenes y adultos", explicó a Efe Román Martín, un joven jockey de 22 años, que debutaba hoy en una de estas pruebas de obstáculos.
En la primera cita de la temporada no podían faltar los aficionados de siempre y los curiosos que se quieren incorporar a este deporte, tan minoritario en una tierra de caballos como es España.
Gracias a la buena conexión con el centro de la capital -mediante una lanzadera de autobuses gratuitos- y a los precios asequibles -9 euros adultos, niños hasta 14 años gratis-, el Hipódromo madrileño confía en que esta sea la temporada de lanzamiento del turf en nuestro país, tanto para aficionados como para competidores.
"Llevo varios años viniendo y apostando, desde que se reabrió el Hipódromo, y esperaba con ganas el nuevo curso. Va a ser una temporada muy interesante, en la que competirán algunos de los mejores caballos; tendremos carreras muy buenas en 2013", contaba a Efe Álvaro Martínez, un asiduo del circuito madrileño.
En un año clave para el Hipódromo de la Zarzuela, el circuito madrileño confía en revertir la situación económica y transformar pérdidas en ganancias y convertir las carreras de caballos en una actividad de ocio para toda la familia.
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