Flores anula también el SpaceFest del día 17

Culpa a los «responsables de las administraciones» de la cancelación del evento, que sigue prometiendo celebrar

La «clásica» fiesta de Año Nuevo que Miguel Ángel Flores venía celebrando desde hace siete años ha vuelto a posponerse. Tampoco será el 17 de marzo, fecha fijada en un primer momento por la empresa organizadora, debido a los «impedimentos sufridos en los últimos meses». Diviertt colgó un comunicado en la web del evento el pasado miércoles en el que anunciaba la cancelación de la cita para marzo pero no de la fiesta, para la que siguen buscando ubicación. En el escrito, el principal imputado por la muerte de cinco jóvenes la pasada noche de Halloween en el Madrid Arena transmite a sus clientes su «voluntad» de encontrar «una solución» y les pide «confianza» en que podrá «remover los obstáculos» para lograr la celebración del festival de música electrónica. El pabellón municipal Madrid Arena era el escenario inicial del Spacefest, pero después de la tragedia del 1 de noviembre fue cerrado por el juez instructor de la causa, Eduardo López-Palop. Flores no quiso cancelar la cita y durante todo el mes de diciembre trató de buscar una nueva ubicación para la fiesta del 1 de enero. La Cubierta de Leganés sería el escenario, pero el Ayuntamiento de la localidad lo cerró esos días por detectar fallos de seguridad en el recinto. Así, Diviertt fijó su última fecha: sería el 17 de marzo pero el lugar era una incógnita. El empresario, no obstante, también ha tenido que anular la fecha. En su comunicado, asegura que sigue «buscando vías y fórmulas para materializar la celebración del SpaceFest, un evento que no puede desaparecer por la resistencia de ciertos responsables de las administraciones». Diviertt viene a decir que el Ayuntamiento trata de boicotear el festival y los acusa de no asumir «su responsabilidad». Para el empresario, tanto Madridec (gestora del pabellón) como el Ayuntamiento «ha optado por impedir sin más la celebración de ciertos eventos ne la ciudad», lejos de «asumir su responsabilidad y procurar una solución». Y es que el imputado encabeza su comunicado explicando que el Arena «no reúne las condiciones técnicas y de seguridad legalmente exigibles». Unas deficiencias que no le impidieron, no obstante, meter a miles de personas allí a lo largo de los últimos años hasta que el brutal sobreaforo de la Thriller Music Park terminó en tragedia. La nueva cancelación ha provocado una oleada de reacciones en las redes sociales. Quienes tenían su entrada y reclamaron la devolución del dinero se quejan de que aún no han visto un euro. De hecho, el pasado viernes muchos clientes se concentraron frente a la discoteca Macumba (propiedad de Flores) para exigir al imputado la devolución del dinero de las entradas. Quieren presentar reclamaciones masivas ante Facua.