Génova deja la negociación de las listas por Madrid para abril

Las listas del PP de Madrid no se abordarán hasta el próximo mes de abril. La dirección nacional ha decidido apurar los plazos para entrar en esta negociación con la presidenta del PP regional y candidata al Ayuntamiento, Esperanza Aguirre.

Las listas del PP de Madrid no se abordarán hasta el próximo mes de abril. La dirección nacional ha decidido apurar los plazos para entrar en esta negociación con la presidenta del PP regional y candidata al Ayuntamiento, Esperanza Aguirre. El «pulso» lo dan por descontado y no quieren más ruido externo que interfiera en la campaña de las elecciones andaluzas. Por tanto, Génova cierra la puerta a abrir este debate antes del mes que viene.

El plazo para el inicio de la presentación de candidaturas comienza el 15 de abril y termina el día 20. La proclamación será el día 27. Por tanto, la cúpula popular tiene ahí dos semanas de margen para «remangarse» y resolver una negociación que anticipan «complicada». Aunque puede haber problemas puntuales en otras comunidades autónomas y en otros municipios, las candidaturas de la Comunidad y del Ayuntamiento de Madrid son ahora uno de los principales retos pendientes.

Esperanza Aguirre ha ido haciendo un partido a su medida. Quien ahora, ante estas elecciones municipales, ha cuestionado que los nombramientos dependan de la decisión del presidente nacional del PP, Mariano Rajoy, de la «divina providencia» llegó a decir, ha utilizado, sin embargo, su «dedo divino» para ir también conformando un «aparato» regional de partidarios. Por el contrario, a la delegada del Gobierno y candidata a la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, no se le conocían hasta ahora «camarillas» internas. «Le surgirán los fieles a patadas desde que es candidata, pero hasta ahora no tenía satélites señalados a su alrededor», comenta un veterano político madrileño.

Y ante este escenario, todos los ojos están ya puestos en ver cómo quedan las listas municipales y a la Asamblea de Madrid para determinar, así, las cuotas de una y de otra y concluir cómo se hace el reparto de poder. Génova dejará a Aguirre que conforme su grupo municipal, pero entiende que Cifuentes también tiene que tener que libertad para conformar el suyo en la Asamblea. No hay que perder de vista que las dos listas las tiene que aprobar el Comité Electoral Regional que preside Salvador Victoria, uno de los fieles «escuderos» del todavía presidente de la Comunidad, Ignacio González, y, en consecuencia, de la cuerda opuesta a la delegada del Gobierno. El mediador será el «hombre» de Génova, Juan Carlos Vera.

Esta batalla por la confección de las candidaturas será una más en el camino que lleve hasta el proceso de relevo en la dirección del PP de Madrid. Un proceso que estará condicionado por los resultados de mayo por mucho que parta de un acuerdo inicial para que Aguirre se retire de la vía. Las urnas también determinarán el poder de Aguirre y de Cifuentes para inclinar de su lado la refriega por el control del partido, que se activará a partir de la celebración de los comicios.

De momento, la dirección nacional va dejando caer sus mensajes. Ayer mismo, el vicesecretario de Política Autonómica y Local del Partido Popular, Javier Arenas, advertía de que en la confección de las listas hay que respetar los estatutos del partido, que atribuyen competencia al Comité Electoral Nacional cuando se trata de candidaturas a las capitales o a las comunidades autónomas. Arenas precisó que Esperanza Aguirre tendrá «un peso específico» al elaborar la lista electoral, pero subrayó, al tiempo, que también el Comité Electoral Nacional tiene «competencias» al respecto.

El vicesecretario del PP apeló a la «armonía» interna, pese a los «pequeños matices» que les puedan «separar». E intentó poner asimismo sordina a las diferencias con la dirección nacional, que Aguirre se está encargando de hacer visibles en estos primeros días como candidata. Génova no echará más leña al fuego de la que añada la candidata municipal en Madrid. Y su mantra es que confían en que todo el proceso «estará regido por el diálogo y por la cohesión interna». Javier Arenas defendió que el tándem que forman Aguirre y Cifuentes es «un acierto» porque ambas son «las mejores candidatas».