Política

Contaminación en Madrid

Greenpeace cuelga una pancarta para denunciar la contaminación en Madrid

Hoy está activado el escenario 2 del protocolo antipolución que prohíbe el acceso a los vehículos sin etiqueta ambiental en el interior de la M-30

Con las medidas anticontaminación activadas, que impiden el acceso al interior de la M-30 a los vehículos sin etiqueta ambiental de la DGT, han colgado una pancarta para reivindicar la lucha contra la polución.

Desde las 6:00 de esta mañana los conductores cuyo vehículo no tenga distintivo ambiental de la DGT “B”, “C”, “ECO” o “CERO”, tiene restringido el acceso a la M-30 y el interior de la capital. Además, quienes entren en la ciudad con las etiquetas “B” o “C”, no pueden utilizar el Servicio de Estacionamiento Regulado (SER), a menos que sean residentes y tan sólo en sus barrios. Todo ello forma parte, junto con la reducción de velocidad en la M-30 y accesos a la ciudad desde la M-40 del escenario 2 del protocolo anticontaminación que se activó ayer por parte del Ayuntamiento de Madrid.

Con este panorama, activistas de Greenpeace han llevado a cabo una acción en Madrid para denunciar la mala calidad del aire colgando pancartas sobre un panel de señalización variable en el enlace de la M-30 con la A-1 coincidiendo con la hora punta de tráfico de entrada a la ciudad. En las pancartas podía leerse “Madrid se asfixia”, “38.000 muertes al año por contaminación” y “No más coches”, alertando del peligro para la salud pública en periodos de alta contaminación.

La entidad recuerda que la contaminación es un problema que va más allá del ámbito municipal y se ha referido concretamente a los casos de Coslada o Getafe que “han registrado niveles de polución por encima del límite fijado por la Unión Europea” esta semana. “Mientras que medidas como el nuevo protocolo o Madrid Central han resultado efectivas en el interior de la ciudad, los accesos desde otros municipios siguen colapsados con un número excesivo de automóviles, tal y como estamos comprobando hoy en la A-1”, ha explicado Greenpeace.

Por este motivo reclaman a las administraciones públicas que garanticen un transporte público rápido y eficaz que "invite a dejar el coche en casa, algo que la Comunidad de Madrid no puede seguir boicoteando al recurrir judicialmente una medida efectiva como Madrid Central mientras reduce al mismo tiempo las frecuencias de metro".

Con esta acción, Greenpeace ha querido recordar a las administraciones que la "restricción de los vehículos de combustible fósil es la medida más efectiva para frenar los niveles de contaminación en las áreas urbanas". Además, deben adoptar medidas concretas para potenciar el transporte público y reducir la contaminación provocada por la dependencia del coche.

En este sentido, ha defendido la necesidad de aprobar la Ley de Cambio Climático y Transición Energética y que los gobiernos autonómicos deben recuperen "la oferta de transporte público recortada durante la crisis económica, así como implantar billetes integrados que faciliten la intermodalidad entre los diferentes transportes".

Asimismo, animan a los ayuntamientos a que sigan con la ejecución de sus respectivos Planes de Movilidad y Calidad del Aire y "potencien un reparto más justo del espacio público".