Sucesos

La Fiscalía investiga las causas del derrumbe del edificio

Los bomberos decidieron demoler la parte superior para trabajar más rápido en el rescate

Los bomberos corrieron riesgo por desprendimiento. Foto: BOMBEROS DE MADRID
Los bomberos corrieron riesgo por desprendimiento. Foto: BOMBEROS DE MADRIDlarazon

La Fiscalía Provincial abrió una investigación por el derrumbe parcial el pasado martes, a raíz del cual dos personas permanecen sepultadas. Mientras los bomberos continuaban anoche trabajando para localizar el paradero de los dos españoles atrapados, la sección de Siniestralidad laboral de la Fiscalía inició ayer las diligencias de investigación para el esclarecimiento de los hechos.

Según informó la Fiscalía de la Comunidad, dieron instrucciones a la Policía Judicial con el fin de aclarar las circunstancias de lo acontecido. Hasta el momento se desconocen los motivos del siniestro. La concejala presidenta del distrito de Chamberí, Esther Gómez, anunció ayer que el Ayuntamiento estudiará los papeles de obra del edificio, a pesar de que la alcaldesa Manuela Carmena se aseguró en el momento del siniestro que la empresa constructora tenía todos los permisos en regla.

Al tiempo en que comienzaban las primeras indagaciones, más de 50 bomberos del Ayuntamiento proseguían, sin descanso, con las labores de rescate. Durante toda la noche del martes se dividieron en dos turnos y, mientras un primer grupo desescombraba con sus propias manos para abrirse camino hasta la zona afectada, otro equipo realizaba demoliciones controladas en la parte superior del edificio, donde se encuentran los elementos estructurales más inestables.

El vicepresidente y portavoz de la Comunidad de Madrid, Pedro Rollán, expresó que los bomberos estaban saliendo «extenuados» porque son los primeros que conocen «el riesgo de la actuación que están realizando». Rollán señaló que las labores de desescombrado eran «muy complejas» y que procedieron a articular «una cadena humana» para ir retirando escombros y «conquistar espacio» para las labores de búsqueda, completadas con la de los perros de Policía Nacional y Municipal, que habían detectado dos posibles «puntos calientes».

Hacia la 12:00 horas del día siguiente y por lo delicado del terreno, prácticamente todos los trabajos continuaron realizándose «a mano», con palas o cortadoras de forjado. El ritmo de los bomberos era irremediablemente «lento» y agotador, dada la posibilidad de que algún elemento se desprendiera sobre sus cabezas.

Hacia las 17:00 horas de la tarde de ayer se cumplieron 24 horas del desplome. Desde entones cada minuto era crucial, por lo que los bomberos decidieron cambiar de estrategia y dedicar casi la totalidad de sus efectivos al desmontaje de elementos inestables.

Para este nuevo cometido introdujeron una grúa con el brazo extensible más grande disponible en España, tras lo cual lograron desbloquear el techo para poder entrar al inmueble «a cielo abierto». Sin embargo, sobre las 18:00 horas de la tarde, no lograron localizar a los desaparidos en las zonas marcadas por los perros. Al cierre de esta edición, continuaban las labores.