Madrid

La Policía Municipal de Madrid recupera a 831 animales aturdidos por el calor del verano

Se han recuperado pájaros como cernícalos, búhos, cigüeñas y otros animales como serpientes o conejos.

Cría de búho recuperada por la Unidad de Medio Ambiente de la Policía Municipal de Madrid
Cría de búho recuperada por la Unidad de Medio Ambiente de la Policía Municipal de Madridlarazon

La Unidad de Medio Ambiente de la Policía Municipal de Madrid recupera a 831 animales aturdidos por el calor en junio y julio, la mayoría de ellos aves, que en muchos casos han sido crías que caen del nido por las altas temperaturas o porque intentan emprender el vuelo.

La Unidad de Medio Ambiente de la Policía Municipal de Madrid recupera a 831 animales aturdidos por el calor en junio y julio, la mayoría de ellos aves, que en muchos casos han sido crías que caen del nido por las altas temperaturas o porque intentan emprender el vuelo.

Según ha explicado una portavoz del cuerpo a Europa Press, en verano suele haber más casos en los que tienen que recoger animales desvalidos en la calle, especialmente en las aves cuyo número "se dispara".

Estos animales procrean durante la primavera, por lo que los polluelos suelen ser muy pequeños todavía cuando llega el verano, así algunos de ellos se lanzan desde los nidos para aprender a volar, en muchos casos sin éxito.

Así, durante el verano se han recuperado pájaros como cernícalos, búhos, cigüeñas y otros animales como serpientes o conejos. Una vez asistidos, en el caso de que lo precisen, los efectivos policiales los trasladan a centros especiales de recuperación de animales del Ayuntamiento y, en el caso específico de las aves, al centro Brinzal.

Por su parte, el miembro de SEO Birdlife Álvaro Díaz ha explicado a Europa Press que los más afectados por las altas temperaturas son los vencejos, ya que tienden a anidar en grietas y resquicios en los que, con las olas de calor, aumenta mucho la temperatura y "se tiran desesperados, pues están metidos en un horno".

Así, advierte de que en este caso, conforme continúe agravándose la crisis climática y con ella aumente la frecuencia de las olas de calor y se batan récords de temperatura, irá a más y que "es una cuestión más difícil de tener en cuenta".

En el caso del resto de animales aturdidos por el calor ha recomendado instalar pequeños bebederos para garantizar el acceso al agua y evitar "insolaciones y golpes de calor". Ha lamentado que progresivamente hayan desaparecido los espacios urbanos con agua y con ello limitándose las posibilidades de los animales para hidratarse. Ep