Luz verde al túnel peatonal entre Gran Vía y Sol

La Comunidad licita las obras para construir un pasillo de 85 metros que unirá las líneas 1 y 5 con la estación de Cercanías del «kilómetro cero».

La unión peatonal entre las estaciones de Gran Vía y Sol está cada vez más cerca. El Consejo de Gobierno dio ayer luz verde a la licitación de las obras para construir un túnel subterráneo que conectará las líneas 1 y 5 de Metro con la red de Cercanías, la ampliación de Gran Vía y la mejora de la accesibilidad de esta estación por un importe total de 18 millones de euros. Los trabajos para ejecutar el pasillo bajo la calle Montera, que contarán con un presupuesto de 6,2 millones de euros y un plazo de ejecución de un año, supondrán la construcción de un subterráneo –que será acondicionado por Adif– de 85 metros de longitud y 5,5 de anchura que facilitará la movilidad de 23.000 viajeros cada día. El pasillo creará «un eje que descargará el volumen de viajeros que actualmente absorbe la estación de Sol», explica el Gobierno regional. Además, se espera que la nueva infraestructura logre una mejor distribución del flujo de viajeros en caso de grandes eventos que obligan a cerrar los accesos a la estación de Sol como la celebración de Nochevieja.

Junto con la conexión, las obras modernizarán una de las estaciones más antiguas de la red madrileña que abrió en 1919 con el nombre de Red de San Luis. Así, dentro del Plan de Accesibilidad 2016-2020 de Metro, se incluye la ampliación de Gran Vía que en la actualidad cuenta con 908 metros cuadrados de superficie y pasillos de reducidas dimensiones. El objetivo es que «se convierta en un nudo estratégico de comunicación en pleno centro de Madrid», además de duplicar el espacio para los 44.000 viajeros que utilizan el metro de Gran Vía a diario, que disfrutarán de «instalaciones mejores y conexiones más rápidas», explicó la presidenta regional, Cristina Cifuentes, en declaraciones recogidas por Efe. La solución propuesta pasa por crear una estructura subterránea que duplicará el espacio disponible para los viajeros hasta los 2.000 metros cuadrados, reubicando los tornos y otros elementos para mejorar la distribución de los usuarios. Las nueve escaleras mecánicas que dan servicio actualmente a las instalaciones se completarán con otros seis tramos más y con la instalación de cuatro nuevos ascensores que conectarán el vestíbulo con los distintos andenes de las líneas 1 y 5, con el pasillo de conexión con Cercanías y con la calle. Los viajeros con movilidad reducida encontrarán también otros dispositivos como sistemas de apertura fácil en puertas, tiras antideslizantes en escaleras fijas, etiquetas braille en los pasamanos, señalización de elementos de accesibilidad, pasamanos a doble altura, interfonos de comunicación adaptados o pavimentos de tacto visual cerámico para facilitar sus desplazamientos.

Otras estaciones como Portazgo, Príncipe Pío, Príncipe de Vergara, Plaza Elíptica, Bilbao y Tribunal se beneficiarán de la instalación de nuevos ascensores.