Ningún miembro del Gobierno de Carmena estuvo con Asun

Las Plataformas antidesahucios denuncian que fue el jefe de Servicios Sociales de Ciudad Lineal quien negoció el aplazamiento del desalojo

La primera medalla social que el equipo de gobierno de Manuela Carmena se ha colgado ha sido rechazada por aquellos que respaldaban a Ahora Madrid por su promesa de paralización de desahucios. La Plataforma Antidesahucios de Centro y (PAH Centro), su homóloga de Vallecas (PAH Vallekas) y la Asamblea de Vivienda de Ciudad Lineal o la Plataforma Stop Desahucios, sacaron los colores ayer al nuevo ejecutivo municipal por arrogarse el mérito de haber parado el desalojo de Asun en Ciudad Lineal este martes cuando «no hubo nadie de Ahora Madrid en el desahucio».

De hecho, el único representante del consistorio madrileño presente en la negociación para conseguir tras semanas más a Asun para reunir el dinero que adeuda y no perder su vivienda fue Javier Pomar, funcionario de carrera y jefe del departamento de Servicios Sociales del distrito de Ciudad Lineal desde hace años que, junto al Samur Social, no se movió del domicilio hasta conseguir el aplazamiento. Pomar aplicaba así el protocolo que diseñó el PP, con Ana Botella al frente de los Servicios Sociales y después como alcaldesa, para mediar en estas situaciones de emergencia social.

La propia Botella centró gran parte de su discurso de investidura como regidora en diciembre de 2011 a la lucha contra los desahucios mediante la creación de una Red de Viviendas Solidarias que sustanció seis meses después, tras reiterar su promesa en el Debate sobre el Estado de la Ciudad, mediante la entrega de 200 viviendas de la Empresa Municipal de la Vivienda y Suelo (EMVS) a Cáritas, Cruz Roja y Provivienda, mediante un programa que, además de incluir un alquiler reducido, establece un calendario de pagos para las familias en situación de riesgo. De hecho, fuentes de Servicios Sociales municipales aseguran que durante su mandato se han entregado 418 hogares sociales tanto por circunstancias de desahucio como por otras necesidades de emergencia social. «La potencia de los Servicios Sociales del Ayuntamiento no tiene parangón», insisten.

Las propias PAH Centro y PAH Vallekas detallaron en un comunicado que, en el caso de Asun, el equipo de Gobierno en funciones ya había estudiado su caso y le habían ofrecido tanto un albergue como una vivienda compartida de Cáritas, cosa que rechazaron las asociaciones al considerarlo un último recurso. Igualmente explicaron que el domingo la nueva concejala de Ciudad Lineal se puso en contacto con ellos para asegurar que haría lo posible por evitar el desahucio, sin embargo, afirmaron ayer que no tuvieron más noticias suyas. Sí que reconocieron que al parecer hubo una intervención del nuevo concejal de Seguridad, Javier Barbero, ante el juzgado, pero aseguraron que «la negociación durante el desahucio se llevó a cabo desde el colectivo, sin que apareciera ningún cargo electo de Ahora Madrid durante la hora y media que duró».

En cambio, Javier Pomar sí habló con la comisión judicial y negoció junto a las asociaciones para que se aplicase el aplazamiento, al tiempo que ofreció en todo momento los recursos de urgencia del Samur Social para que Asun no pasase ni un sólo día en la calle. Según explicaron desde Servicios Sociales, Pomar no hizo otra cosa que aplicar el protocolo municipal mediante el cual el trabajador social o el jefe del departamento acude a todos los desahucios que se produzcan.

Antes de ello, el protocolo contempla la atención a los afectados en la Junta de Distrito y se les ofrecen todos los recursos posibles ya sea de renta como habitacionales como alternativa, como ocurrió en el caso de la mujer de Vallecas que recibió ayuda del Rayo Vallecano y a quien el consistorio había ofrecido reiteradamente una alternativa al desahucio de su hogar, cosa que rechazó puesto que quería quedarse en el barrio. «También se habla con los juzgados, que son quienes ordenan los desahucios para mediar en los mismos y muchas veces se logra una paralización o, al menos, un aplazamiento por todo tipo de motivos», señalan las mismas fuentes.

En la nota de prensa en la que el Gobierno de Manuela Carmena presumía de haber paralizado su primer desahucio explicaban que «en breve se irá formalizando el protocolo en el que participarán los concejales de distrito, el responsable del área de Seguridad, los trabajadores de Servicios Sociales y las organizaciones sociales del distrito», protocolo que ya existe y cuyas novedades, como en el caso del programa diseñado por Ana Botella para dar de comer en verano a los menores con problemas de malnutrición, esperan conocer cuanto antes puesto que «todo es susceptible de mejorar», afirman.

No opinan lo mismo en las PAH, que criticaron ayer que la nueva concejala de Vivienda, Marta Higueras, confesase que «el Ayuntamiento no puede parar los desahucios». Es más, desde las plataformas antidesahucios denunciaron que «no es de recibo que Carmena se haya reunido ya con los responsables de los desahucios, léase gestores de Bankia, y no con la PAH». «Ahora Madrid prometía no ser un partido de más ni mejores gestores sino inaugurar otra forma de hacer política: una de cogobierno con la ciudadanía y los movimientos sociales que se han dejado la piel los últimos años», señalan y reclaman una reunión cuanto antes.