Patio Maravillas okupa otro edificio en la víspera de entrar en Cibeles

Sólo 15 horas permaneció el colectivo Patio Maravillas sin ocupar ilegalmente un inmueble de la capital. En torno a las cinco de la madrugada, agentes de la Policía Nacional conseguían desalojar sin incidentes ni detenciones el «centro social» que sus integrantes habían instalado en la calle Pez. Y poco después de las siete de la tarde, al terminar una protesta por el desalojo, lograban entrar y ocupar otro edificio, éste ubicado en el número 9 de la calle Divino Pastor.

No hubo ningún tipo de incidentes en el desalojo efectuado por la mañana debido a que sólo había una persona cuando la Policía se personó en el inmueble. Al atisbar la presencia de los agentes, esta persona salió huyendo del edificio por el tejado. Poco después de que quedara completado el desalojo, el propietario y titular del edificio ordenó que se tapiaran las puertas y ventanas. La actuación de la Policía responde a la decisión adoptada por el juzgado de Instrucción número 45 de Madrid, que remitió el pasado 20 de mayo un oficio a la Comisaría de Centro para hacer efectiva la orden judicial de desalojo del Patio Maravillas, plasmada en un auto dictado el pasado 19 de febrero.

El simbolismo de este edificio radica, fundamentalmente, en ser el cuartel general de Podemos. De hecho, miembros destacados de este colectivo okupa han formado parte de la lista electoral de Podemos en Madrid así como de la candidatura de Ahora Madrid, como el guionista Guillermo Zapata, uno de los promotores de Ganemos y futuro concejal de Cultura en el Gobierno de Manuela Carmena. Nada más hacerse pública la noticias del desalojo, algunos rostros conocidos de Podemos como el recién elegido diputado de la Asamblea Pablo Padilla criticaron lo sucedido: «El desalojo tiene una intencionalidad política. Es una pataleta de un Gobierno saliente, una especie de venganza a tres días de un nuevo consistorio que se constituye el sábado». La delegada del Gobierno, Concepción Dancausa, se limitó a subrayar que «había una orden judicial y la Policía ha cumplido la orden».

La reacción más relevante, sin embargo, la realizó el partido Ahora Madrid a través de un comunicado ya que su líder, Manuela Carmena, se convertirá mañana en alcaldesa de la ciudad. Ahora Madrid lamentó en el comunicado el desalojo así como «la escasa posibilidad de participación ciudadana que existe en Madrid». Alineado con las tesis de movimiento okupa, el partido de Carmena lamenta las «reiteradas negativas de cesión de espacios públicos que centros sociales como el Patio Maravillas reciben continuamente por parte de las instituciones». Una situación que, según Ahora Madrid, acabará este fin de semana ya que una de las iniciativas que recoge su programa participativo es el fomento de la gestión colectiva de recursos comunes en la ciudad: «Se promoverá una normativa municipal para la cesión y cogestión de espacios públicos por parte de la ciudadanía con normas que garanticen el derecho al uso y gestión de dichos espacios en unas condiciones de cesión dignas».

En rechazo al desalojo, los integrantes de Patio Maravillas convocaron una manifestación a la que acudieron cuatro diputados electos de Podemos en la Asamblea de Madrid y que finalizó con la ocupación de otro inmueble, en la calle Divino Pastor. En un momento de la marcha, varias decenas de activistas accedieron a este inmueble de cinco plantas. Colgaron una pancarta de uno de los balcones en la que se puede leer: «Estamos construyendo. No especular», y leyeron un manifiesto en el que justificaban su acción en el hecho de que el consistorio haya vendido el edificio a un «fondo buitre».