Podemos, en contra de la reducción de diputados

La reforma de la circunscripción y el número de representantes serán los caballos de batalla en la plan de regeneración de Cifuentes

La modificación de la circunscripción y la reducción de diputados van a ser los grandes escollos de las medidas de regeneración que esta semana presentó la presidenta de la Comunidad, Cristina Cifuentes. Podemos considera «cosmética» dicha bajada y no la apoya porque defienden que «ahí no está el problema de la regeneración democrática». Temen los de Pablo Iglesias, al igual que el PSOE, que la reducción de diputados se traduzca en una pérdida de proporcionalidad, aunque los socialistas son favorables a poner coto al incremento de representantes cada año. Por su parte, Ciudadanos apuesta por bajar de 129 a 101 representantes aunque se muestra flexible con las cifras.

Cifuentes anunció una batería de propuestas para reformar la política madrileña que pasan por un consenso fundamental con la oposición ya que algunas necesitan la aprobación de dos tercios de la Asamblea. El Gobierno regional ha agrupado las reformas en dos grandes iniciativas legislativas. Por un lado, en la modificación del Estatuto de Autonomía se agruparán la supresión del aforamiento, la reducción del número de diputados, la limitación del mandato del presidente y los consejeros a dos legislaturas y la modificación de la circunscripción electoral de la provincia.

Y, por el otro lado, se reformarán cuatro artículos de la Ley Electoral y de la Ley de Gobierno y Administración de la Comunidad de Madrid para incluir la incompatibilidad de los cargos de diputado y alcalde o concejal; la incompatibilidad de viceconsejero y diputado; el sistema electoral de listas abiertas; la dedicación no exclusiva de los diputados con carácter residual, y concreción de los gastos de representación de los altos cargos.

De ellas, sin duda la segunda es la más fácil de alcanzar ya que todos los grupos políticos llevaban cuestiones similares en sus respectivos programas. Tanto Ciudadanos como Podemos son adalides de las listas abiertas y el PSOE no se cierra a ellas, si bien el diputado socialista José Manuel Franco matizó que prefieren las listas cerradas pero desbloqueadas, «de modo que los madrileños puedan elegir el orden que prefieran». Respecto a la incompatibilidad de cargos, el portavoz de Podemos, José Manuel López ,apuntó al grupo parlamentario popular y recomendó a Cifuentes que empiece por «barrer su propia casa, ya que en su grupo hay muchas personas que acumulan cargos de diputados y alcaldes». Tanto Franco como López criticaron que la presidenta no se haya reunido con ellos, como sí lo hizo con Ciudadanos, antes de presentar las propuestas de regeneración.

Pero los verdaderos problemas surgirán con la modificación del Estatuto de Autonomía ya que, pese a que hay cuestiones como la eliminación de los aforamientos o la limitación de mandatos en las que hay un consenso general, no hay acuerdo en cuanto a la reducción de diputados y la modificación de la circunscripción. Especialmente espinosa para Cifuentes es la reforma de la circunscripción electoral, que la presidenta defiende que sea inferior a la provincia. Sin embargo, el resto de grupos sospechan de esta nueva aritmética electoral en una circunscripción como la madrileña, que, según recordaron el portavoz de Ciudadanos, Ignacio Aguado, y el socialista José Manuel Franco, «es la más pura de España entre el número de escaños y el número de votos», por lo que abogan por «no cambiarla». Un paso más allá va el portavoz de Podemos, que considera que esta propuesta «se dirige a resolver mediante modificaciones legislativas la pérdida de mayoría absoluta del PP». López considera a su vez que esta propuesta va en contra de lo que piden los ciudadanos, que son «leyes más proporcionales que reflejen la pluralidad existente en la sociedad».

La cuestión del umbral del 5 al 3%

La presidenta regional ha dejado fuera de sus propuestas de regeneración democrática la bajada del umbral del 5% de los votos para obtener representación en la Asamblea de Madrid al 3%, que sí respaldan PSOE, Podemos y Ciudadanos y que en las pasadas elecciones habría permitido obtener diputados a Izquierda Unida, que logró el 4,14% de los votos. Con el actual equilibrio de fuerzas en la Cámara regional, esta medida puede ser una de las condiciones de la negociación.