Mutua Madrid Open

Portazo de los organizadores: «El Mutua Open no se vende»

Hace poco más de un año los ediles Mayer y Sánchez-Mato denunciaron por supuesta prevaricación el contrato que firmó Gallardón para la organización del Open. Ahora, Cueto hasta se plantea «comprar» el torneo a buen precio.

Portazo de los organizadores: «El Mutua Open no se vende»
Portazo de los organizadores: «El Mutua Open no se vende»larazon

Hace poco más de un año los ediles Mayer y Sánchez-Mato denunciaron por supuesta prevaricación el contrato que firmó Gallardón para la organización del Open. Ahora, Cueto hasta se plantea «comprar» el torneo a buen precio.

En apenas 15 meses, el Open de Madrid de Tenis ha pasado de ser un dolor de cabeza para la alcaldesa, Manuela Carmena, a un objeto de deseo. Y es que archivada la querella de dos de los ediles más díscolos de su Gobierno por presunta prevaricación del convenio del torneo, ayer el coordinador de la Alcaldía, Luis Cueto, se mostró más que dispuesto a mantener el Mutua Madrid Open e, incluso, comprarlo si se lo dejan «a un precio razonable».

Y es que tras más de un año de tensiones debido a los procedimientos judiciales en torno al convenio entre el consistorio y la organización del torneo, cuyos dirigentes Ion Tiriac y Gerad Tsobanian han puesto en duda la continuidad del mismo, ayer se reunieron por fin con los representantes municipales y los portavoces de los partidos de la oposición en el Ayuntamiento de Madrid. A la salida de la primera «toma de contacto», la impresión general era buena por todas las partes.

De hecho, Cueto avanzó que pretenden alcanzar un acuerdo como muy tarde en diciembre, «cuanto más lejos de las elecciones mejor, porque tensionan mucho». Asimismo, señaló que dentro de la «tormenta de ideas» que lanzaron ayer sobre la mesa de negociación también estaba la posibilidad de que el Ayuntamiento compre el torneo. «En la mesa hemos dicho desde que Madrid compre el torneo si es que el propietario lo vendiera a un precio razonable porque eso garantizaría que el Mutua Open se queda en la ciudad para siempre o, si no es rentable para el consistorio o el promotor no quisiera, manejar todas las fórmulas posibles que tiene el derecho español», afirmó.

Un edificio más

Sin embargo, el presidente del torneo fue tajante: «El Mutua no se vende». «La venta del torneo no es una fórmula que se contemple», insistió Tsobanian, que, por contra, apuntó a la posibilidad de añadir un edificio más a la celebración del torneo, como ha ocurrido en otros eventos en California o Miami. Una ampliación que hace apenas dos semanas era una amenaza por parte del propietario del Master de tenis de Madrid, Ion Tiriac, que exigía la construcción de un estadio de 10.000 plazas para mantener el torneo en la capital.

Actualmente, el Mutua Madrid Open tiene garantizada su continuidad en la capital hasta 2021, aunque Tiriac ya avanzó que tiene ofertas para que se traslade a Alemania o Rusia, por lo que puso como límite el 1 de agosto para recibir una respuesta favorable del consistorio madrileño. El propietario de la licencia del torneo pretendía aislar así la organización del Open de la incertidumbre de las próximas elecciones municipales de 2019. De este modo, la negociación que comenzó ayer busca prolongar este evento hasta más adelante y los organizadores plantean la posibilidad de que el torneo crezca para poder absorber la demanda de público al evento.

Al margen de las exigencias de uno y otro lado, Tsobanian reconoció que la reunión de ayer «era lo que necesitábamos, abrir el diálogo entre nosotros y los partidos y hemos encontrado a la gente dispuesta a discutir con nosotros y preparar el futuro conjuntamente». «El Ayuntamiento está con el máximo compromiso de hacer todos los esfuerzos posibles para que Madrid mantenga este torneo, ya que es un evento de éxito de toda la ciudad», aseguró Cueto.

A ello ha contribuido el apoyo unánime de los grupos de la oposición para que el Mutua Open se quede en la capital al margen de «los vaivenes políticos de los sucesivos cambios de gobierno», tal y como señaló la portavoz de Ciudadanos, Begoña Villacís. Por su parte, los portavoces del PP y PSOE destacaron el beneficio para la ciudad que supone el torneo. «Nos han expuesto los números y el crecimiento del Mutua Madrid Open y el retorno para la ciudad es muy bueno, además de una imagen de marca muy importante», consideró Martínez-Almedia, mientras que Puri Causapié reiteró su voluntad de mantener el torneo «para que venga mucha gente, para que haya mucha actividad en Madrid y sirva para promocionar la ciudad en el exterior».

Querella ridícula

Al buen entendimiento ha contribuido la crítica unánime de todos los grupos al «ridículo» protagonizado por los ediles Celia Mayer y Carlos Sánchez-Mato después del archivo, el pasado mes de marzo, de la denuncia por supuesta prevaricación en el convenio de organización del Open de Tenis. Los dos concejales de Ahora Madrid, junto con la entonces consejera delegada de Madrid Destino, Ana Varela, denunciaron el 23 de marzo de 2017 ante la Fiscalía Anticorrupción el convenio suscrito por Alberto Ruiz-Gallardón para la organización del Open de Tenis. La denuncia se basaba en dos informes que encargaron a un despacho de abogados pese a que había informes realizados por los servicios jurídicos del Ayuntamiento de Madrid que indicaban que no había ninguna ilegalidad. Los ediles presentaron la querella a espaldas de Carmena, lo que le costó la dirección del área de Cultura a Celia Mayer.

Además, el grupo del PP en el consistorio madrileño denunció a su vez a los ediles y a Varela por su presunta implicación en la comisión de delitos de prevaricación, malversación de fondos públicos y delito societario al haber pagado de las arcas municipales los informes externos que utilizaron para denunciar el convenio. Para ello, «trocearon» en dos partidas de 50.000 euros los encargos a dos auditorías privadas –tan solo una de ellas concluyó que existían irregularidades– para evitar pasar por el trámite del concurso público, obligatorio para contratos más caros. Y todo ello sin conocimiento del Consejo de Administración de Madrid Destino y la Alcaldía. A día de hoy, los dos concejales y Varela tienen la condición de investigados en el procedimiento de Instrucción que sigue el Juzgado número 21 de Madrid.