Primer set de tanteo

Ayer se verificó el primer set de tanteo en el partido de las negociaciones que disputan el Ayuntamiento de Madrid y los promotores del prestigioso torneo Open de Tenis. Al final, el PP saltó a la cancha para formar parte del equipo municipal y ponerse a las órdenes del «capitán», el sobrinísimo Luis Cueto, y de esta forma participar activamente en esa primera toma de contacto. A última hora, los populares entendieron, que era mejor observar sobre el tapete, que quedarse al margen de un asunto muy importante para la ciudad, un torneo que tiene un retorno de 100 millones de euros, y que al Ayuntamiento le representa un coste de sólo 10 millones. Siguen creyendo los del PP que la llamada de la alcaldesa, Manuela Carmena, a que todos los grupos políticos formen equipo en este partido, tiene como objetivo evitar sorpresas de última hora, como el que algunos de sus concejales de Ahora Madrid, voten en contra del futuro acuerdo, y se dé al traste con el resultado. También han valorado esa intención oculta de rentabilizarlo políticamente, con rédito electoral garantizado, porque ningún regidor de la villa puede permitirse el lujo de que se marche de la capital un evento deportivo de esta envergadura, aunque a muchos, el tenis les dé igual.

El PP ha pensado, a última hora, que si no participaba en este equipo municipal y por ello no se llegara a buen puerto, quién podría rentabilizar el fiasco y cargárselo a los populares, sería el gobierno de Carmena y los otros dos partidos de la oposición: PSOE y Cs.Como siempre que no se ha alcanzado todavía un acuerdo, pero que tampoco se perpetra un desacuerdo, las partes en litigio, acuden a calificativos como: «las negociaciones van bien encaminadas», o : «ha sido un encuentro muy eficaz», y todo queda en un balance de buenas intenciones con el ánimo de empezar a negociar en serio sobre propuestas concretas; sobre la contraoferta que el Ayuntamiento hace a los organizadores, los máximos y mínimos, aunque todos han hecho un pacto de confidencialidad, para que no se rompa el huevo.

La madre de todas las exigencias de los promotores, es la construcción de un estadio para 10.000 plazas, cuestión que hasta hace unos días, el Ayuntamiento no estaba dispuesto a asumir y que ahora admite alternativas, como levantarlo junto a la Caja Mágica, siempre y cuando el ordenamiento urbanístico lo permita; buscar otra ubicación cercana y costear la obra (entre 12 y 25 millones de euros) con patrocinio privado. También el municipio estaría decidido a poner dinero para costear los premios del torneo. Por donde no está dispuesto a pasar en el acuerdo, es por satisfacer el deseo de los promotores de que el Ayuntamiento se comprometa a «comprar» 30 palcos, cuando tendría suficiente con un par de ellos, para atender los compromisos institucionales.

Puede que la próxima semana comiencen las negociaciones, ya con peticiones y propuestas concretas sobre la mesa, aunque en el Ayuntamiento rebajan las exigencias de cerrar un acuerdo de forma rápida, y cree que hasta diciembre hay tiempo. Si no hay firma y no se prorroga del contrato, que expira en 2021, ya hay tres ciudades en lista de espera: Munich, Berlín y Moscú. Madrid tiene que hacer todo lo posible para que no se vaya de nuestra ciudad este torneo que, habiendo cumplido la mayoría de edad, goza del suficiente prestigio como para mantenernos en la élite de los másters 1000 de tenis.

De momento, ayer se celebró el primer set de tanteo sin resultado oficial. Queda mucho partido por disputar.