«Serrano debe dimitir si lo que quiere es ser comisario»

El director de la Policía intenta ascender, pero no cuenta con el apoyo de los trabajadores del Cuerpo

Andrés Serrano, el director general de la Policía Municipal de Madrid y mano derecha de José Javier Barbero, delegado del Área de Gobierno de Salud, Seguridad y Emergencias, podrá ascender a comisario tras haber sido admitido en las listas provisionales de promoción interna del cuerpo al que se presentaba junto con otros 14 compañeros. Este hecho ha desencadenado diversas críticas por parte del colectivo ya que consideran que su puesto como principal responsable de los agentes al frente del Cuerpo podría favorecerle.

Tras la alcaldesa y el concejal José Javier Barbero, Andrés Serrano es la máxima autoridad dentro del Cuerpo. Por este motivo, desde la Asociación de Policía Municipal Unificada (APMU) consideran que, «si se quiere presentar al concurso debe dimitir» y alegan que «es él y su equipo los que designan las bases y el tribunal, no puede ser juez y parte». A esto se suma « el cambio de actitud que ha tomado en torno a la creación de plazas. Hace un tiempo creía que había un exceso de puestos superiores y ahora saca tres plazas». «Parte de los participantes que se presentan para obtener el puesto han pensado emprender acciones legales si, finalmente, existen irregularidades», confirman desde la asociación. Desde el punto de vista legal, Andrés Serrano puede presentarse a las pruebas que se realizarán en septiembre y donde se resolverá finalmente quien accede al puesto de comisario ya que cumple los requisitos que esto implica. Sin embargo, desde la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) creen que «puede ser legal, pero no es ni ético ni moral, estos comportamientos desmerecen al Cuerpo porque no sabemos que beneficios va a tener a la hora de hacerse con la plaza». Desde el sindicato aseguran que «este concurso para obtener el puesto de comisario se ha hecho con mucha premura, quieren hacerlo antes de que haya un cambio de Gobierno en el Ayuntamiento» .

Esta polémica se suma a todos los enfrentamientos que se han vivido desde que comenzaran las reuniones para pactar un nuevo convenio colectivo. Durante las fiestas del Orgullo Gay los agentes se encontraron con turnos de hasta 15 y 20 horas, además de esto, y a última hora, el director de la Policía, Andrés Serrano les manifestó a los policías que se suprimían las libranzas. Con la amenaza de huelga en el aire, el día siete de julio, el día del desfile, se presentaron 222 bajas por enfermedad por parte de trabajadores del Cuerpo lo que enfrentó más al colectivo con el Ayuntamiento, que aseguró que investigarían y denunciarían esta actitud por la «vía penal». La organización del festival Mad Cool, también fue un caos y los agentes sufrieron las consecuencias al trabajar en unas condiciones nada convenientes, con altas temperaturas y sin agua, según denunciaron los sindicatos policiales, además de tener que alargar, nuevamente, su jornada laboral. El último episodio de confrontación vino protagonizado por el sindicato CSIF, que denunció al Consistorio por «quebrantar los derechos de sus agentes». Desde este mismo sindicato y ante la actitud de Andrés Serrano, creen que «la institución de Carmena pretende dejar a todo el mundo colocado antes de las elecciones».

Aumenta la tensión entre los agentes

La Policía Municipal continúa teniendo problemas con la cúpula del Cuerpo. Los enfrentamientos prosiguen tras las quejas de los agentes por el trato recibido durante el Orgullo Gay y el festival MadCool, en el que trabajaron con elevadas temperaturas y sin agua. Andrés Serrano, que ya ha protagonizado varias polémicas, se presenta ahora al puesto de comisario. Sin embargo, los trabajadores creen que debido a su puesto podría obtener beneficios.