Región de Murcia

Colapso productivo si no llega agua

Los agricultores advierten de que la situación es catastrófica y piden medidas extraordinarias

Los agricultores advierten de que la situación es catastrófica y piden medidas extraordinarias

La situación actual de la agricultura en la Región es catastrófica ante la falta de agua, por lo que se hace necesario poner en marcha medidas extraordinarias, antes del mes de enero, para que no se produzca un colapso productivo y un deterioro definitivo de las plantas de arbolado, que podría ser irrecuperable en algunas zonas. Así lo ha señalado el secretario general de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos de Murcia (UPA), Marcos Alarcón, quien asegura que si no se toman medidas urgentes afectará al empleo y a la producción de las plantaciones.

Los agricultores se quejan de que no se ha ampliado la capacidad de la desaladora de Torrevieja, de que no ha llegado el precio social del agua desalada y de que los agricultores del Campo de Cartagena no puedan usar el acuífero sobre el que están sentados porque las actuaciones de la Confederación Hidrográfica «destrozando» salmoleoductos ha provocado que se disponga de menos agua.

Según Alarcón, las pérdidas ya son incalculables y aumentan día a día exponencialmente. De seguir así, asegura, 2018 puede ser el año en el que se produzca una pérdida de capacidad productiva impresionante y comiéncen a secarse árboles, por lo que considera que el papel de motor de empleo, sobre todo en la agricultura, se verá muy resentido.

La situación no solo afectará al trabajo en el campo, sino también al transporte de mercancías, a los fabricantes de abonos y a otros sectores productivos, con una repercusión destacable en el conjunto de la economía de municipios esencialmente agrícolas como Torre Pacheco, Totana o Alhama de Murcia.

Según los datos aportados por UPA, alguna comunidad de regantes de Lorca cuenta con reservas hasta final de diciembre, pero el resto del Valle del Guadalentín subsiste a duras penas, mientras el Campo de Cartagena no tiene abierto ni los pozos de sequía, en la Vega Media no les queda agua y la zona de frutales puede aguantar poco más. La sequía ha provocado que haya menos hectáreas de hortalizas y que se deslocalicen plantaciones a zonas con agua.