El Resucitado llena de alegría los municipios de la Región

El color blanco de las túnicas nazarenas pone el punto y final a la Semana Santa

El color blanco y la alegría de las procesiones de Resurrección pusieron punto y final a las celebraciones de la Semana Santa en la Región. En todas las poblaciones se celebraron los desfiles del Cristo Resucitado en los que el júbilo pone el broche final a los días de luto y silencio.

Cientos de personas se agolparon a las puertas de la iglesia de Nuestra Señora de la Salceda de Las Torres de Cotillas a primera hora de la mañana para ver la salida de la procesión del Resucitado, cuyas escenas más emotiva fueron el Encuentro, protagonizado por el Cristo Resucitado, San Juan y la Virgen de la Victoria, y el baile de los tronos.

En Lorca, la Virgen de la Encarnación se encontraba con Nuestro Señor Jesús Resucitado, en la procesión más llena de alegría y fervor popular de la Semana Santa lorquina. La imagen de Jesús Resucitado desfiló en trono de andas portado por su archicofradía en medio de una incesante lluvia de pétalos y vítores llenos de emoción.

La Procesión del Encuentro puso un año más el punto y final a los Días Santos en San Pedro del Pinatar. Vecinos y visitantes presenciaron la procesión en la que participaron cinco imágenes y todas las cofradías y hermandades que son testigos del encuentro de Jesús Resucitado con su madre, la Virgen de los Dolores, frente a la plaza Luis Molina ante la atenta mirada de la Magdalena y San Juan, así como la Cruz tendida en el Calvario. Los nazarenos, ya desprendidos del capuz, repartieron miles de caramelos entre los asistentes.

En Cartagena, el desfile partía de la Iglesia de Santa María de Gracia a las 10:30 de la mañana para recorrer las calles del centro de la ciudad donde se agolpaba numeroso público para ver los distintos tronos que componen la procesión.

El popular personaje del demonio pintado de negro, constituye el colofón de los desfiles procesionales murcianos. Los miembros de la cofradía vestían la túnica y el sombrero hebreo y llevavan la cara destapada.