Región de Murcia

La terapia con caballos mejora la salud de los menores maltratados

La Asociación Quiero Crecer trata a 65 víctimas de maltrato físico y psicológico para aumentar su autoestima, el estado emocional y la sociabilidad

Alguno de los caballos utilizados en la terapia había sido maltratado y rescatado, por lo que la identificación del menor con el equino era más fuerte por el paralelismo de las historias LA RAZÓN
Alguno de los caballos utilizados en la terapia había sido maltratado y rescatado, por lo que la identificación del menor con el equino era más fuerte por el paralelismo de las historias LA RAZÓNlarazon

La Asociación Quiero Crecer trata a 65 víctimas de maltrato físico y psicológico para aumentar su autoestima, el estado emocional y la sociabilidad

Un total de 65 menores que han sido víctimas de malos tratos físicos y psicológicos han conseguido mejorar su estado emocional tras seguir una terapia con caballos que ha logrado aumentar su autoestima, sus niveles de sociabilidad y la seguridad en ellos mismos.

Los tratamientos que imparte la Asociación Quiero Crecer desde 2015 en las instalaciones del Centro Ecuestre Centauro Quirón en El Valle Perdido, han sido financiados por la Fundación Trinitario Casanova. El programa de equinoterapia es pionero en España y sirve como complemento a las terapias tradicionales que siguen los menores que han sufrido algún tipo de maltrato.

Durante dos horas semanales los psicólogos ayudan al menor a desarrollar ejercicios de cuidado e higiene del caballo, volteo terapeútico, equitación adaptada y cuidado del prado con lo que consiguen grandes avances, especialmente en su entorno más cercano donde mejoran aspectos como el respeto, la empatía, la automotivación o la positividad.

En este sentido, la directora de la Asociación, Mavi Alcántara, destaca que son muchas las mejoras en la conducta del menor maltratado gracias a la gratificación táctil con el animal, pero además es palpable la mejora clínica del paciente ya que disminuyen de forma considerable sus niveles de ansiedad y la disforia y se reconduce el miedo y la inseguridad ante situaciones de la vida cotidiana.

La terapia en Quiero Crecer la coordina un equipo de siete profesionales compuesto por psicólogos, fisioterapeutas y técnicos ecuestres. El tratamiento con los pacientes se lleva a cabo con tres yeguas y dos caballos llamados Flecha, Lluvia, Rumba, Saleroso y Secreto.

Para los psicólogos esta experiencia ha sido única porque en ocasiones algún equino había sido expuesto a situaciones de maltrato y que posteriormente fue rescatado, por lo que la identificación del menor con el caballo es muy fuerte, en algunos casos, incluso emocionante para los terapeutas por el paralelismo de las historias entre humanos y animales.