Iglesia y Urbanismo financiarán la tercera fase de Santa María la Blanca

Tras dos años y medio de obras, la iglesia de Santa María la Blanca quedará reabierta al culto el próximo viernes. Sin embargo, el complejo proceso de restauración no está del todo concluido. Todavía falta por acometer la tercera y última fase del proyecto, consistente en la recuperación de las espectaculares yeserías de la cúpula y las bóvedas, quizás la seña de identidad más marcada de esta antigua sinagoga.

Para este fin el Arzobispado y la Gerencia de Urbanismo están ultimando la firma de un convenio de colaboración. Esta actuación podría ascender a 500.000 euros, aunque las conversaciones ya están muy avanzadas para financiar los trabajos, al menos parcialmente, tal y como se asegura desde el Arzobispado.

Pero el párroco y los feligreses no se van a quedar cruzados de brazos a la espera de que las administraciones se pongan de acuerdo. Quieren pasar a la acción otra vez para recaudar fondos y así acelerar el proceso. Por ello, se ha organizado una representación teatral, titulada «La Pasión», y la recaudación irá destinada íntegramente a sufragar la tercera fase de la obra. Tendrá lugar el sábado 2 de marzo en la Sala Joaquín Turina y la obra estará representada por la compañía «La Farándula», integrada por antiguos alumnos de los Salesianos.

La limpieza de esta profusa decoración, además de las pinturas murales que actualmente están ennegrecidas, será el colofón a unas actuaciones que comenzaron tras la Semana Santa de 2010. Ante la aparición de humedades y grietas, la Consejería de Cultura y el Arzobispado firmaron en julio de 2009 un convenio de colaboración para intervenir en las cubiertas. Comenzaba así la primera fase del proceso, que incluía también la consolidación de la espadaña –que ha perdido el añadido trasero que distorsionaba su perfil– y la mejora de la sujección de las bóvedas interiores.

Nueva solería

Esta actuación terminó el pasado mes de mayo y contó con una inversión de 823.018 euros. La Junta aportó el 80 por ciento, un total de 658.414, y el Arzobispado el 20 por ciento restante, que ascendió a 164.603. De la aportación autonómica todavía quedan por liquidar 246.904, según apuntan fuentes de la Iglesia.

Una vez reparadas las cubiertas, le tocaba el turno al suelo. La segunda fase consistió en la sustitución de la solería y la restauración de los azulejos de los muros laterales. Para estos trabajos no se contó con la colaboración de las administraciones, por lo que el párroco y los feligreses lograron reunir los 400.000 euros necesarios. Precisamente, éstos han sido los más interesados en que se reabra el templo, incluso con la tercera fase pendiente. La Virgen de las Nieves ya está en el templo y sólo falta llenarlo de cultos.