Lotería de Navidad

San Idelfonso, el santo más famoso de la Lotería de Navidad

Además de ponerle nombre al famoso colegio, San Ildefonso es patrono de la ciudad de Toledo y Padre de la Iglesia Católica

Retrato de San Idelfonso (607-667)
Retrato de San Idelfonso (607-667)La Razón

La tradición de que los niños del Colegio de San Ildefonso canten los premios de la Lotería de Navidad se remonta al primer sorteo oficial de la Lotería de Navidad, celebrado en 1812. Concretamente, esta práctica se originó el 9 de marzo de 1771, durante el reinado de Carlos III. En esa época, un niño llamado Diego López se convirtió en el primer estudiante del Colegio San Ildefonso en cantar los números de la lotería. Sin embargo, no se sabe con certeza por qué fueron ellos los elegidos.

Una teoría ampliamente aceptada sostiene que los estudiantes del colegio solían cantar en las calles y plazas de la ciudad para pedir limosna. Las autoridades, al observar esta situación, decidieron transformar la desventura de los niños en una oportunidad. Así, se propusieron redirigir la dedicación de los niños hacia una actividad más adecuada y provechosa, al tiempo que añadían un toque distintivo a la ceremonia de entrega de los premios de la Lotería de Navidad, que por sí misma no es especialmente atractiva.

El origen del colegio

El Colegio San Ildefonso tiene una historia notable que se remonta a 1543. Durante varios siglos, este establecimiento sirvió como un refugio para niños en situación de vulnerabilidad, funcionando como un orfanato. Con los cambios sociales y políticos que trajo la democracia, el colegio comenzó a transformarse, convirtiéndose en un colegio masculino en 1981.

Un niño de la residencia de San Ildefonso canta un quinto premio. Eduardo Parra / Europa Press
Un niño de la residencia de San Ildefonso canta un quinto premio. Eduardo Parra / Europa PressEduardo ParraEuropa Press

Pero la historia del colegio no se detuvo allí. En 1984, tres años después de convertirse en un colegio masculino, las niñas se unieron a sus compañeros varones. Esto fue un cambio significativo, ya que las niñas también comenzaron a compartir el papel de cantar los números del Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad.

Sin embargo, el cambio más grande en la historia del colegio llegó a finales de los años 90. Después de más de siglos de existencia, el colegio se dividió en dos instituciones separadas. Una de ellas es una residencia - internado, que alberga a unos 60 niños, y la otra es un colegio público que forma parte del sistema educativo de la Comunidad de Madrid. Los niños escogidos para entonar el sorteo de la Lotería de Navidad pertenecen al internado.

La selección de los participantes se lleva a cabo en octubre, aproximadamente dos meses antes del famoso sorteo, que se celebra anualmente el 22 de diciembre. Tras ser seleccionados, los niños dedican media hora diaria a los ensayos, preparándose para el esperado día en el que repartirán alegría y esperanza durante este tradicional evento navideño.

¿Quién fue San Ildefonso?

Además de ponerle nombre al famoso colegio, San Ildefonso es patrono de la ciudad de Toledo, Padre de la Iglesia católica y reconocido Arzobispo toledano, fallecido en el año 667, en pleno dominio visigodo.

Ildefonso nació en Toledo, España, alrededor del año 606 aunque fue en Sevilla por monjes que le dieron una sólida formación humanística, lo que se refleja en sus escritos. Desde pequeño, Ildefonso sintió una gran atracción por la vida monástica, y cuando fue adulto, decidió dedicarse a ella. Como monje, se convirtió en el líder del monasterio de Agalí, su ciudad natal.

En 657, Ildefonso fue designado como Arzobispo de Toledo. Desde este cargo, dedicó sus esfuerzos a unificar la liturgia en los reinos de España. Es autor de varias obras destacadas, entre las que sobresale su defensa de la virginidad de Santa María, titulada De virginitate Sanctae Mariae contra tres infideles. También escribió Liber de cognitione Baptismi unus, un importante tratado sobre el Bautismo.

La noche del 18 de diciembre de 665, San Ildefonso y algunos monjes del monasterio Agaliense fueron a la capilla para realizar sus cantos de fin de día en honor a la Virgen María. Durante esta actividad, notaron que la capilla estaba iluminada de manera extraordinaria. Ante esta situación, la mayoría de las personas presentes decidieron abandonar el lugar, quedando solo San Ildefonso y dos diáconos.

Los tres se acercaron al altar y vieron a la Virgen María, quien estaba sentada en el lugar donde normalmente se sienta el obispo, y estaba rodeada de un coro de vírgenes. La Virgen le pidió a Ildefonso que se acercara. Ildefonso siempre tuvo una fuerte devoción hacia la Virgen María, especialmente como la Inmaculada Concepción, y promovió su veneración mucho antes de que fuera oficialmente reconocida. Mientras estaba de rodillas frente a la Madre de Dios, Ildefonso recibió de ella una casulla, que es lo que los sacerdotes usan para celebrar la misa. Ella le pidió que la usara solo en los días festivos en su honor: "Tú eres mi capellán y fiel notario. Recibe esta casulla, la cual mi Hijo te envía de su tesorería", le dijo la Virgen a Ildefonso.

San Ildefonso fue Arzobispo de Toledo
San Ildefonso fue Arzobispo de ToledoLa Razón

En un Concilio realizado en Toledo, se decidió recordar la aparición de la Virgen María a San Ildefonso con una fecha especial. Este suceso, conocido como "El Descendimiento de la Santísima Virgen y de su Aparición", quedó registrado para la historia. San Ildefonso murió el 23 de enero del año 667. A día de hoy, la gente visita la catedral que lleva su nombre donde se guarda la piedra donde la Virgen María se apareció.