Contra el cambio climático, acción sostenible

El cambio climático es una de las principales amenazas a las que nos enfrentamos en la actualidad. El aumento de la temperatura global afecta a todos los seres vivos, ecosistemas y procesos naturales. Su impacto ya se refleja en nuestros días con temperaturas extremas, sequías o lluvias torrenciales, pero, si no tomamos acción, sus consecuencias en el futuro serán realmente devastadoras para el planeta. Contar con un plan de acción sostenible no solo supone cumplir con la actual legislación medioambiental y energética, sino responsabilizarse de un problema que nos concierne a todos.

Y es que el cambio climático se debe directa o indirectamente a la acción del ser humano. Los núcleos urbanos son los que más contribuyen a la emisión de gases que dañan la atmósfera, una de las principales causas del calentamiento global. Las consecuencias son fatales: incremento de la temperatura, aumento del nivel del mar, modificaciones en el patrón de precipitaciones, sequías, desestabilización de los ecosistemas, fenómenos meteorológicos extremos, pérdida de la producción agrícola en la parte sur…

Ciudades gestionadas con responsabilidad

¿Qué pueden hacer las ciudades por frenar el cambio climático? Si bien son las principales responsables del daño provocado, también tienen en su mano las herramientas necesarias para liderar la transición energética. El Ayuntamiento de Valladolid dispone de un plan de acción local para contribuir a la mitigación del cambio climático, preparar la ciudad para futuros escenarios medioambientales y energéticos y mejorar la calidad de vida de sus habitantes y turistas. El objetivo, que forma parte de las prioridades de la Agenda Urbana 2030, es rediseñar la ciudad para que sea más sostenibles, con acciones sobre la ordenación del territorio, el transporte, la edificación y la eficiencia energética.

Un reto medioambiental

A través de la Agencia Energética Municipal de Valladolid (AEMVA), la ciudad quiere continuar promoviendo acciones de ahorro y eficiencia para conseguir un uso racional de la energía así como avanzar hacia la implantación masiva de energías limpias o renovables.

Desde su creación, este organismo ha ejecutado 44 proyectos de instalaciones fotovoltaicas en edificios de titularidad municipal, ha aprobado una ordenanza sobre energía solar, ha puesto en marcha un servicio gratuito de préstamo de bicicletas y ha promovido diferentes acciones enfocadas al ahorro de agua.