Fotografía
Peter Lindbergh: el artista que cambió la fotografía de moda
Peter Lindbergh fue un visionario. Se inspiró en la fotografía de moda de su época para darle un giro y crear un trabajo realmente especial. Carisma, nostalgia y mucha elegancia en unas fotografías para no olvidar.
Cuatro decenios a la vanguardia de la fotografía de moda. Este podría ser el resumen de la vida de Peter Lindbergh, el fotógrafo alemán que creó nuevas narrativas con un enfoque deliciosamente especial. Sus fotografías hablan de melancolía romántica y evocan un carismático misterio que nos atrapa. Por el objetivo de Lindbergh han pasado las exclusivas colecciones de diseñadores como Azzedine Alaïa, Giorgio Armani, Alber Elbaz, John Galliano, Jean Paul Gaultier, Karl Lagerfeld, Thierry Mugler, Yves Saint Laurent, Jil Sander y Yohji Yamamoto. Colaboraciones con los nombres más venerados de la moda.
Una trayectoria profesional que se recoge en un libro de la editorial TASCHEN. Este lanzamiento recoge más de 300 fotografías del artista. Entre ellas, la serie White Shirts, con una jovencísima Linda Evangelista en una playa de Malibú en 1988. O las fotografías de la campaña de Comme des Garçons, que Rej Kawabubo encomendó a Lindbergh.
El artista reflejaba en cada trabajo su propia personalidad, alejándose de los estándares que marcaba la publicidad y la belleza de la época. Para él, cada disparo con su cámara recogía la instantánea de un momento, las facciones de una modelo que no destacaban por sus siluetas sensuales, sino por su enorme carisma. Ver una fotografía de Lindbergh era contemplar el alma de sus retratados.
Por su objetivo pasaron reconocidos rostros como Kate Moss, Naomi Campbell, Linda Evangelista, Cindy Crawford, Mariacarla Boscono, Lara Stone, Claudia Schiffer, Amber Valletta, Nadja Auermann y Kristen McMenamy. La influencia de Lindbergh también llegó hasta Hollywood, fotografiando a Cate Blanchett, Charlotte Rampling, Richard Gere, Isabelle Huppert, Nicole Kidman, Madonna, Brad Pitt, Catherine Deneuve y Jeanne Moreau.
Y es que el trabajo de Lindbergh no era fotografía pura de moda. Era un arte. Por eso, desde el comienzo de su carrera, Lindbergh fue conocido en el mundo del arte contemporáneo. Como prueba bastaría con saber que sus fotografías se exhibieron en galerías mucho antes de que aparecieran en revistas. El legado de un artista en un libro insuperable.
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