En La Chèvre D’Or disfrutarás de la Riviera Francesa y la Costa Azul como nunca

En el lujoso hotel La Chèvre d’Or, la naturaleza está en todas partes. Los jardines están repletos de esculturas, fuentes, cascadas, flores, hierbas, árboles y arbustos. ¿Suena bien, no? Pues huele aún mejor. Toda la zona se perfuma de jazmín, rosas y buganvilias. Los colores son espléndidos. Aquí, pasear por la Riviera Francesa se convierte en una experiencia casi celestial.

La Chèvre D’Or reúne unas magníficas habitaciones y suites y varios restaurantes y bares que se impregnan del espíritu de la Costa Azul. Empezaremos hablando de su suite panorámica. Dicen de ella que es un “paraíso flotante”. Una habitación con una terraza exclusiva e íntima suspendida sobre el mar, piscina privada y jacuzzi, con vistas al ancho y amplio Mar Mediterráneo. Un auténtico oasis para dos con vistas al azul. Al color azul en toda su expresión. Cuenta con una superficie de 134m² de lujo y confort.

Vayamos ahora a conocer su versión gourmet. La Chèvre D’Or cuenta con cuatro restaurantes donde se celebra el placer de compartir y comer los mejores alimentos locales. Toda la inspiración del Mar Mediterráneo se localiza en esta cocina gourmet con vistas. Nos centraremos en su restaurante con el mismo nombre, La Chèvre D’Or. Cuenta con dos estrellas Michelin y se fundamenta en “una cocina solar, mineral y marina”. Su menú, inspirado en estos contrastes, unifica los productos de la Riviera Francesa y del país entero.

No queríamos dejar de hablar de otro de sus restaurantes y terrazas, Le Café du Jardin. El lugar ideal para un almuerzo agradable e informal o una tarde relajante saborear un cóctel o una bebida refrescante hasta el atardecer. Su menú refrescante y ligero se inspira en la frontera italiana y combina las mejores creaciones de pizza, ensalada fresca y carne y pescado a la parrilla. El paraíso está más cerca de lo que creemos y se llama La Chèvre D’Or.