El mineral poco común que alcanza un valor estratosférico es la Tanzanita

Esto es lo que ha sucedido recientemente con el hallazgo de dos grandes rocas del preciado mineral llamado Tanzanita, las más grandes jamás vistas en la historia del país.

La Tanzanita, variedad del mineral Zoisita, es original de las colinas de la región de Manyara, en el norte de Tanzania, y de ahí su nombre. Se usa en joyería, aunque también se vende en piezas sueltas y está catalogada como una gema única y preciosa en peligro de extinción, puesto que está previsto que para dentro de veinte años se agoten los suministros si no se encuentra un nuevo yacimiento.

Cuando fue descubierta por primera vez de mano de unos buscadores de tesoros en el año 1967, se pensaba que estas piedras eran zafiros de una calidad exquisita. No fue años más tarde, después de un exhaustivo análisis, cuando vieron que se trataba de una piedra preciosa que llevaba oculta más de seis mil años y que un incendio forestal en el Kilimanjaro ocurrido hace más de cincuenta años fue el causante de su magnífico color, muy alejado del que tenía anteriormente.

Debido a esta serie de características, a que solo se obtiene en este país de África y a su variedad de colores en tonos azules, verdes púrpuras y rojos, es la gema más codiciada del mundo y su precio en el mercado, así como su demanda, es considerablemente alto, cada vez más.

Por otra parte, cabe mencionar que es un mineral relativamente blando y por eso requiere de cuidados especiales. Su dureza es de 6.5 en la escala de Mohs, que llega hasta el 10, y necesita de lapidadores expertos que la traten con delicadeza ya que tiene un crucero perfecto que avanza en una sola dirección.

Es una variedad tan exquisita que Tiffany & Co. fue la primera casa de alta joyería en apostar por este mineral en 1968 y promoverlo. Más tarde, grandes firmas se interesarían por la belleza sin igual de una gema escasa. El color más codiciado en el sector es el típico azul intenso.

Las dos rocas encontradas hace pocas semanas en Tanzania por un minero de la zona, pesan un total de 15 kilos, mientras que la roca de Tanzanita más grande extraída hasta la fecha era de 3,3 kilos. El Ministerio de Minerales pagó al afortunado de encontrarlas nada más y nada menos que tres millones de euros.