Esta es la historia de un hombre que quiso construir el coche de sus sueños (y lo consiguió)

La historia de Juan Hurtado comienza en la década de los años 80. Todo comenzó con un deseo incesante de construir algo que aún no existía, de crear el coche que veía en sus sueños. A través de su constancia y mezclando un exquisito mimo artesano con una extensa tradición, sus deseos (y los de los enamorados del motor) se hicieron realidad.

Inspirado en los clásicos de la década de los 50 y 60, Juan comenzó a trabajar en el que sería su primer éxito. Esta creación le llevó por decenas de exposiciones y eventos. Y es que Juan era “un enamorado de los coches clásicos, de sus irrepetibles líneas”, como él mismo decía.

Su sueño convertido en coche se transformó en fábrica, su propia fábrica de automóviles artesanales de lujo, llamada Casa Hurtan. Fundada en 1992, la casa se hizo un hueco en el mundo del motor mediante la creación de coches artesanales para exposiciones y clientes locales.

La Casa Hurtan de nuestros días

Casa Hurtan es Juan Hurtado pero también son sus hijos. Juan, Rosa y Francisco Hurtado dirigen en la actualidad la firma y buscan llevar la marca más lejos trabajando en nuevos modelos que combinen la tradición y la artesanía con las nuevas tecnologías. “De esta forma, y siempre siguiendo una línea clásica, han comenzado a desarrollar algunos modelos de líneas deportivas, coches eléctricos, prototipos, concept car... Consiguiendo una tipología de coche única, un estilo propio que hace de la marca Hurtan una casa exclusiva a nivel mundial”, afirman desde la propia web.

En esta empresa exclusiva y familiar, cada coche se hace de forma artesanal e individual. Con sede en Granada, en la actualidad Hurtan cuenta con una demanda que le ha hecho situarse en los mercados nacionales e internacionales. Tanto es así, que en la actualidad la mayor demanda de vehículos en la casa Hurtan procede de los mercados asiáticos y de Oriente medio. Un sueño que vuela lejos...