Vivienda
Descubrimos cómo es la propiedad más cara de Miami
La venta de la inmensa villa estadounidense, compuesta por dos edificios y amplios terrenos ajardinados, ha supuesto un nuevo récord para el condado de Miami-Dade por su elevado precio de venta
En la orilla de la bahía de Vizcaya, en la exclusiva zona de Coconut Grove de Miami, se sitúa una de las propiedades más impresionantes del estado de Florida. El terreno, dividido en dos mansiones independientes unidas por la zona ajardinada común se ha convertido en noticia por romper un récord.
Desde hace unos días, esta propiedad se ha convertido en la venta residencial más cara del sector inmobiliario de la zona de Miami-Dade, superando el anterior récord de 93 millones de dólares. La inmobiliaria The Arch Estate pedía inicialmente un total de 150 millones de dólares por la vivienda a los compradores interesados, pero, tras siete meses en el mercado, han aceptado una oferta un 29% más baja, 106′9 millones de dólares.
La antigua villa de Adrienne Arsht, abogada y exbanquera, tiene un total de 2.325 metros cuadrados, con un frente costero de más de 120 metros. Entre las dos casas del terreno, Indian Spring y Villa Serena, hay un total de 12 dormitorios, 13 baños completos y un aseo, espacio suficiente para más de una veintena de personas.
La casa secundaria, construida en 1913, está incluida en el Registro Nacional de Lugares Históricos de Estados Unidos, siendo la residencia de William Jennings Bryan, secretario de Estado. El edificio principal se inauguró más de 85 años después, en 1999, obra de José Gelabert-Navia, exdecano de la escuela de Arquitectura de la Universidad de Miami.
Los interiores de Indian Spring y Villa Serena son espectaculares. Divididas en dos plantas, entre sus espaciosas estancias cuentan con un comedor con capacidad para más de 20 invitados, un garaje para seis automóviles, una cancha de tenis y una piscina la zona frontal del terreno.
The Real Real indicó que el terreno fue adquirido originalmente por Adrienne Arsht en 1996 por 4 millones de dólares para construir la residencia principal. 10 años después, la exbanquera pagó 12 millones de dólares para añadir la casa histórica a su propiedad, por lo que con esta venta ha logrado un beneficio considerable.
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