Bugatti recompra cinco coches históricos a un coleccionista

La historia y el legado son importantes para las empresas automovilísticas, más aún para marcas que se remontan en el tiempotan lejos como Bugatti. Fundada por Ettore Bugatti, la marca francesa ha fabricado motos y automóviles desde principios del siglo pasado, por lo que algunos fanáticos del motor tienen unas cuantas de las mayores reliquias de la casa en colecciones privadas.

Bugatti, con la intención de hacerse con los modelos más característicos e irrepetibles que reflejan la historia de la firma, acaba de anunciar que ha comprado a Hans Matti, coleccionista de la marca, cinco ediciones históricas.

El antiguo propietario de estos coches únicos dedicó décadas a esta colección. Para ello, reunió fotografías originales, artículos de revistas, libros y comunicaciones de la fábrica. Además de coleccionarlos, Matti también investigó sus historias y gracias a ello se ha convertido en uno de los mayores expertos del mundo en coches Bugatti Grand Prix.

Vuelta a casa por Navidad

El primer viaje que se ha realizado con estos coches tras el traspaso de dueño ha sido al château Saint Jean de Molsheim, un lugar considerado la cuna de los automóviles Bugatti. El terreno está a escasos kilómetros de donde se fabricaron estas ediciones originalmente, por lo que se podría decir que estos elegantes modelos han cerrado un círculo.

Entre los coches históricos que vuelven a casa se encuentra unBugatti Type 51, uno de los modelos más originales que existen. Se trata de un Gran Premio de fábrica, conducido por el propio Louis Chiron, el homónimo del superdeportivo que todo el mundo conoce. También hay un Type 49, que fue el coche personal del propio Jean Bugatti (con las iniciales “JB” en las puertas). Ambos compartieron un transportador durante su entrega a sus respectivos primeros clientes privados, marcando una reunión que se remonta a 1930.

La colección cuenta, además, con un 37Anotablemente conservado, que forma parte de un largo linaje de coches Bugatti sobrealimentados; un 35B con el motor original del Type 51 y un 35A con el motor, la caja de cambios y el eje trasero originales de un Type 36 que compitió en el circuito de Montlhéry (Francia).

Matti era reacio a desprenderse de su preciosa colección, y es comprensible. La discusión entre él y Bugatti se prolongó durante dos años y medio y finalmente tuvo que participar para convencerle la nieta de Ettore Bugatti, Caroline Bugatti. Y es que, aunque no ha trascendido el precio que han cerrado para firmar este acuerdo, es indudable que el valor de esta pequeña colección, tanto histórico como económico, es incalculable.