«Sentimos informaros de que estamos sin calefacción de nuevo. Intentad traer a los niños abrigados. Estamos en el cole intentando solucionarlo». Es el mensaje que envió a los padres a las ocho de la mañana de ayer Francisco Javier Díaz, el presidente del AMPA del colegio Público María Moliner de Parla. Se difundió como la pólvora por los grupos de WhatsApp. Aunque los padres ya saben que los lunes tienen que llevar a sus hijos con más ropa de lo habitual por los problemas de calefacción del colegio después del fin de semana en el que las aulas suelen estar destempladas. Pero, ayer, la alerta del presidente del AMPA era para tenerla en cuenta. Una caída de la tensión que afectó a todo el municipio el día anterior había dejado sin calefacción el centro educativo. Y eso suponía ir a clase, otra vez, con abrigo.

«Llegué a las 8:00 de la mañana y el colegio estaba helado. No funcionaba la calefacción. La caldera, que es antigua, tiene un temporizador y la falta de suministro obliga a que los técnicos del Ayuntamiento tengan que acudir a programarla de nuevo. Vinieron de inmediato y lo arreglaron, pero ayer las clases no tenían más de 10 grados de temperatura», asegura el presidente del AMPA.

El episodio de ayer es uno de tantos que se vienen produciendo día tras día y, especialmente después de la vuelta al cole tras las vacaciones navideñas. «Es un colegio antiguo, se construyó en el año 1984 y mantiene las mismas ventanas de aluminio que cuando se levantó. Eso provoca una falta de eficiencia energética importante, porque el calor se escapa por las ventanas. A eso se añade que la caldera también es antigua», aseguran desde el AMPA del CEIP. De hecho, los afectados han iniciado una petición en la página web «change.org» para instar a las autoridades competentes a solventar una situación que afecta a unos 700 alumnos del centro escolar.

«Mi hijo no quiere venir al colegio porque pasa frío», lamentaba una de las madres. Ayer, de hecho, a la vista de que las clases iban a estar frías por la caída del suministro del día anterior, algunos padres optaron por no enviar a sus pequeños al colegio para evitar que enfermaran.

«Mi hija ha estado constipada por el frío que ha pasado y, como ella, otros muchos alumnos. Peor situación tienen los niños de Infantil, que cuentan con tres radiadores en la clase, pero sólo funciona uno. Son los que más sufren las bajas temperaturas», explicaba Puri, una madre del centro.

La Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid asegura que los problemas de eficiencia energética que tiene el centro no es una cuestión de su competencia, sino del Ayuntamiento, ya que son las Administraciones locales las que se encargan del mantenimiento de los centros escolares. «Nosotros nos ocupamos de realizar obras de ampliación por necesidades educativas, pero el mantenimiento de las instalaciones es un cometido de los ayuntamientos», aseguró un portavoz.

El Ayuntamiento, por su parte, ha adoptado ya algunas medidas que tratan de paliar el problema pero aún resultan insuficientes. Como medida inicial, desde la concejalía de Educación del municipio «hemos modificado el horario de encendido y apagado de la caldera y se ha ampliado para que mantenga el poder calorífico en las aulas. Lo ocurrido ayer es una cuestión puntual que quedó solventada reiniciando la caldera», explicó una portavoz del Ayuntamiento de Parla. «También estamos en conversaciones con la Comunidad de Madrid para ver qué medidas de ahorro energético podemos llevar a cabo y ya hemos aprobado un pliego de condiciones para la mejora del mantenimiento de cubiertas, lo que mejoraría la climatización», añadió. Aunque el Ayuntamiento admite que no es un problema que se solucione de la noche a la mañana.